La continuidad de Messi en el Barça estaba atada y bien atada. No había razones para dudar de Laporta. ¿O sí? Puede, pero en el periodismo deportivo no se dispararon las alarmas a pesar de que pasaban los días y Messi seguía al sol de Ibiza mientras el equipo empezaba los entrenamientos y disputaba sus primeros partidos de pretemporada. Era cuestión de días que el astro argentino de 34 años aterrizara en la ciudad y firmara no por uno o dos años, sino por cinco. Si alguien tenía sospechas de que nada era normal, no las expuso en público. Le hubieran linchado. En torno al club azulgrana y a Messi discurren turbulentas corrientes de fanatismo.
Los aficionados culés se hacen preguntas y los periodistas responden con argumentos financieros, techos salariales y el "fair play" económico que el Barça no podría cumplir si registrara a Messi junto a los fichajes de Depay, Emerson, Agüero y Eric García más Coutinho, Umtiti, Pjanic, Griezman y el resto de la plantilla. La plantilla está sobredimensionada y arroja dudas. Se confía más bien poco en el rendimiento de vacas sagradas como Piqué o Jordi Alba. Tampoco incita al entusiasmo culé el desempeño en la banqueta de Koeman.
Sólo Messi parecía un valor seguro, una garantía, al menos en la competición nacional. La prensa deportiva apunta a Laporta y vende la historia del crack compungido, destrozado, roto de dolor, en estado de choque emocional. Es lo que filtra el entorno del jugador, el relato de una sorpresa mayúscula, de una terrible decepción, de una inesperada traición, una cosa entre el tango y la milonga. También hay quien le echa la culpa a España encarnada en la Liga. Que no falte el victimismo. Es lo que ha hecho Laporta, cargar contra Javier Tebas, presidente de la Liga Nacional de Fútbol Profesional.
En el Sport escribe Francesc J. Gimeno que "tras sobreponerse a la sorpresa inicial, el portavoz de la familia Messi comunicó al presidente blaugrana la disposición del jugador a rebajarse todavía más su ficha para que el club tuviera margen para inscribirle en LaLiga. La familia Messi dio un margen de tiempo a Laporta para que analizara esa alternativa y se mantuvo a la espera de que los responsables de la entidad tomaran una decisión definitiva al respecto. Finalmente, el Barcelona se puso en contacto con la familia Messi y le comunicó que no había forma de superar la traba del límite salarial y que por tanto resultaba imposible inscribir al jugador de forma reglamentaria. En consecuencia, el club barcelonista daba las negociaciones por rotas y daba así carta blanca para que el futbolista busque un nuevo destino".
De parecido tenor es la crónica de Ferran Martínez en Mundo Deportivo: "Messi estaba realmente afectado, según contaban sus allegados. El argentino regresó ayer de Ibiza para firmar su nuevo contrato con el Barça. Lo tenía totalmente asumido. Aseguraban que todo estaba atado y listo para formalizarse, con el contrato redactado. Que el acuerdo se firmaba ayer jueves y de hecho había una celebración programada para festejarlo en petit comité. Una cena que ya se desprogramó el miércoles por la noche, cuando ya se empezaron a torcer las cosas y se creía que la firma del nuevo contrato se tendría que posponer como mínimo 24 horas. Pero por la mañana, lo que parecían algunos flecos a resolver, se convirtieron en un problema que acabó siendo irreparable y definitivo. Ayer desde el club le llamaron para comunicarle que no lo podían inscribir debido a las restricciones de LaLiga, según explican la versiones oficiales de ambas partes".
"Por qué ha sido económicamente inviable volver a fichar a Messi" es el titular de apertura de Crónica Global. La información, con la firma de Raúl Pozo, desgrana los impedimentos de la operación: "Para empezar, cabe remitirse al sucinto comunicado oficial publicado por el club en su página web. En él se puede leer que “a pesar de haberse llegado a un acuerdo entre el FC Barcelona y Leo Messi y con la clara intención de ambas partes de firmar un nuevo contrato en el día de hoy, no se podrá formalizar debido a obstáculos económicos y estructurales (normativa de LaLiga española)”. En este sentido, una de las bases de esta normativa es el establecimiento de un límite salarial, una especie de techo de gasto, en función de los ingresos que cada temporada generan los clubes por operaciones de traspasos y fichajes de futbolistas y, también, de los emolumentos con los que remuneran a los miembros de la plantilla".
Sigue Pozo: "Al superar el Barça este límite salarial, LaLiga establece como norma que el club tan sólo podrá inscribir nuevos jugadores si procede a liberar el exceso de masa salarial y que, además, en este proceso, tan sólo podrá hacer esta inscripción por el equivalente a un 25% de la citada masa. Es decir, que si el club vendiera a un jugador por 100 millones de euros, LaLiga sólo le dejaría liberar un hueco salarial por 25 millones. Y así, hasta que dejara de rebasar el límite. En el caso del club culé, algunas fuentes sitúan ese exceso por encima de los 200 millones de euros. Porque a la inscripción de Messi con un notable salario habría que añadir la de los cuatro fichajes realizados por el club este verano (Agüero, Eric García, Depay y Emerson), para los que tampoco había hueco salarial. Por lo tanto, pertenecen al club, pero no están dados de alta en LaLiga y, por lo tanto, no podrían jugar la competición".
La situación financiera del Barça no es precisamente para tirar cohetes. La temporada sin público en las gradas ha causado una notable merma en el negocio, así como una política de fichajes en la que se cometieron no pocos excesos. En ese contexto emerge un Laporta con dos caras, el tipo que le dice al soci lo que quiere oir, que es que Messi seguirá toda la vida en el Barça, y el presidente que constata que continuar con el argentino puede provocar que el club acabe convirtiéndose en una sociedad anónima.
El colapso emocional es evidente, aunque es marca de la casa que todos sus hijos predilectos salen fatal del club. Ocurrió con Kubala, Cruyff, Maradona, Schuster y Ronaldinho y el caso de Messi no iba a ser diferente. Los tuiteros Gabriel Rufián y Jordi Évole están destrozados. El primero, que dice ser perico, ha despedido a Messi con una foto de Michael Jordan y un "why?". El segundo, está al borde del llanto: "Tengo 47 años, pero ahora me pondría a llorar como una criatura. Fue muy bonito mientras duró. Mucha suerte allá donde vayas".
A las once está prevista una rueda de prensa de Laporta mientras el clan Messi pondera la manera de despedirse del Barcelona y el barcelonismo. ¿Cabe un giro inesperado? La prensa deportiva considera que no, pero también consideraba que la continuidad de Messi era un hecho. Hay tema para medio año. En cuanto al futuro del futbolista, todo conspira para que acabe jugando con su archienemigo Sergio Ramos en el París Saint Germain. Hace 48 horas posaba en Ibiza con Neymar, Di Maria, Verrati y Leandro Paredes, todos ellos de la plantilla del club parisino del catarí Nasser bin Ghanim Al-Khelaïfi.
Más noticias de Cataluña. Una honda sensación de pesimismo invade al independentismo. Y no es por Messi, que siempre eludió el abrazo del oso. "Els primers gests del govern aparquen la independència almenys fins el 2030" apunta Vilaweb. El texto viene con la firma de Ot Bou Costa y en él se constata que "el govern espanyol i el català han trobat un guix i han dibuixat dos projectes enormes, que afecten l’estructura del model país: l’ampliació de l’aeroport del Prat, que Sánchez feliçment va batejar ara fa dos anys com a Josep Tarradellas, i la presentació d’una candidatura entre Barcelona i el Pirineu per als jocs olímpics d’hivern del 2030. Amb l’aval efusiu a tots dos projectes, el govern espanyol situa el debat sobre el desenvolupament industrial i econòmic de Catalunya al centre de l’actualitat i ha aconseguit que els partits independentistes, tant si ho volen com si no, es posin a debatre’l al marge de la independència, amb el pretext de la urgència. Una urgència que, en el cas de l’aeroport, diversos experts ja han avisat que no és necessària, perquè en casos d’uns altres grans aeroports el debat sobre les ampliacions han durat lustres, i que en el cas dels jocs olímpics és un mer tràmit de presentació de candidatura. Però l’atiament del debat intern no és l’únic tall que el govern espanyol s’endú al sarró. Tant l’ampliació com els jocs són dos projectes que requereixen no tan sols el suport de l’estat espanyol, sinó treballar-hi colze a colze. Per a la candidatura cal la implicació del govern espanyol en els plans de l’organització hipotètica dels jocs, que després s’han de presentar i de publicitar davant el Comitè Olímpic Internacional. Per a l’ampliació, no cal tan sols una inversió multimilionària del govern espanyol, que de moment ha xifrat en 1.700 milions d’euros, sinó que tots dos governs hauran de treballar conjuntament en els tràmits perquè la Comissió Europea en validi els plans".
Al margen de la agenda catalana, las autonomías están en guerra. Ximo Puig, presidente de la Comunidad Valenciana, es partidario de subir la fiscalidad en Madrid. Y esa idea tiene sus adeptos, en general todos los presidentes autonómicos que no son del PP y que consideran que en la capital del Reino se practica una fiscalidad desleal con el resto de España. De la pieza de Luis Ángel Sanz en El Mundo: "La Comunidad de Madrid ha reaccionado con virulencia a las propuestas de subir los impuestos a los madrileños. Primero, ante la idea del Gobierno de la Comunidad Valenciana de imponer un impuesto a los ricos que tienen su domicilio fiscal en la capital de España. Cuando el ministro de Inclusión y de Seguridad Social, José Luis Escrivá, respaldó las tesis del presidente de Valencia, fue el consejero de Economía y Hacienda madrileño, Javier Fernández-Lasquetty, el que ha acusado directamente a Pedro Sánchez de "madrileñofobia fiscal" y de "persecución fiscal a los madrileños" por no votar al PSOE. Lasquetty ha celebrado que gracias a Escrivá "por fin sabemos que es Pedro Sánchez el que nos quiere poner un impuesto a los madrileños por ser madrileños". En su opinión, eso es "persecución fiscal" a los ciudadanos de la Comunidad de Madrid "por no votar al partido de Pedro Sánchez". "Y a eso decimos que ya está bien", ha aseverado".
Sigue la nota: "El consejero de Economía de Isabel Díaz Ayuso ha añadido que a Madrid "le va bien" con los impuestos bajos y con el modelo "que la Comunidad de Madrid ha ido configurando a lo largo de 16 años seguidos" de ejecutivos del PP. En esa misma línea, Fernández-Lasquetty ha anunciado que el Gobierno madrileño va a seguir bajando el IRPF y el Impuesto de Sucesiones "por más que a Sánchez le gustaría que a los madrileños nos frieran a impuestos". "Eso no lo vamos a consentir", ha zanjado. La Comunidad de Madrid ha respondido también a la propuesta del Gobierno de la Comunidad Valenciana. Fuentes del Ejecutivo regional acusan al Govern socialista de Ximo Puig de "pretender ocultar su nefasta gestión con sus ataques a Madrid"".
Noticias de Podemos. Las purgas cuestan dinero porque esto no es Cuba ni Venezuela. Hasta 300.000 podría tener que pagar por los despidos de personal, según cuenta Luca Constantini en Vozpópuli: "Las purgas de Podemos no salen gratis. El partido morado ya ha tenido que indemnizar a dos trabajadores en Valencia, por un total de 27.000 euros. Son los primeros pagos realizados este año (que deberían sumarse a los desembolsados para la demanda de la exescolta de Irene Montero y el abogado José Manuel Calvente). Pero en los próximos meses los tribunales se llenarán de demandas laborales, con afectados en Andalucía, Madrid y País Vasco, en las que Podemos podría ser condenados a nuevos pagos. Las fuentes consultadas cifran ese gasto en 300.000 euros solo este año. Solo en Andalucía, 16 extrabajadores de Podemos han demandado a la coalición de Unidas Podemos tras la escisión con Adelante Andalucía. Se trata de miembros del grupo parlamentario que han demandado al partido ahora controlado por Irene Montero, que podría tener que afrontar unos gastos en indemnizaciones de entre 10.000 y 12.000 euros por trabajador, según comentan las fuentes consultadas. A ellos se suman “dos o tres” trabajadores en el País Vasco. El año pasado dimitió de todos los cargos el ex secretario regional vasco después de unas primarias en las que sorprendentemente ganó la candidata pablista. A partir de ese momento, como a menudo ha ocurrido en otras regiones, se han ejecutados despidos en el partido, cuyos afectados han decidido elevar a los tribunales. En Valencia, por ejemplo, también se celebraron unas primarias con un resultado muy ajustado. Resultó ganadora la oficialista Pilar Lima, y pocos meses después de su triunfo más de cinco trabajadores del partido han sido cesados de manera fulminante".
Coronavirus. Contra lo que cabría suponer, hay personal sanitario reacio a vacunarse. En El País cuentan Pablo Linde y Silvia Ayuso que "cinco autonomías abogan por que la vacuna sea obligatoria para los sanitarios" y que "Sanidad y las comunidades estudian cambios forzosos de puesto laboral y dos test semanales en las residencias". Así arranca el texto: "El debate sobre la protección de los más vulnerables frente a quienes se niegan a vacunarse ha estallado en España, donde la inmunización es voluntaria. Cinco comunidades (Galicia, Cantabria, Andalucía, Canarias y Murcia) piden que la inoculación sea obligatoria para sanitarios y empleados de residencias. Sanidad, siempre en contra de forzar la vacunación, se inclina ahora por endurecer el control en estos centros tras el alza de contagios y estudia con las autonomías cómo hacerlo. Sobre la mesa está la posibilidad de que los trabajadores tengan que pasar dos pruebas semanales o incluso de que puedan ser cambiados de puesto. El Constitucional validó ayer en Francia la vacunación obligatoria para sanitarios y otros profesionales".
6 de agosto, santoral: Claudia, Justo y Hormisda papa.