Caos en El Prat y la escuela de calor de Rajoy
Turull denunciará el colapso del aeropuerto en consulados y embajadas. El PP organiza su escuela de verano para mediados de septiembre en Salou. Rebelión militar en Venezuela
7 agosto, 2017 09:32El Aeropuerto de El Prat acoge escenas más propias de la evacuación de Saigon, Ciudad Ho Chi Minh, que del trasiego de turistas propio de la temporada alta. Se proyecta una imagen lamentable, de país caótico y desorganizado en el que unos seguratas cierran y abren los arcos de seguridad a su antojo. Los trabajadores de seguridad de la empresa Eulen tienen derecho a hacer huelga, principio sagrado que arrasa la libertad de miles de viajeros maltratados como bultos sospechosos.
Como ocurrió en el caso del metro, el chantaje es un poderoso instrumento de negociación que redobla su capacidad coercitiva ante la pasmosa inoperancia del Estado y la estulticia de la Generalitat. El jefe de Aena es José Manuel Vargas, campeón de la gestión en paradero desconocido, tomando cañas o tocándose el níspero debajo de una palmera. Lo que está claro es que ni limpia pescado ni negocia con huelguistas. Lo más seguro es que tras su brillante actuación sea ascendido a algún cargo donde se requiera gente bien remunerada que sepa no hacer nada.
En otros tiempos, año 2010, Rubalcaba declaró el estado de alarma para hacer frente a una huelga encubierta de los controladores aéreos. Ahora se prefiere ceder no sin antes comprobar los efectos de las amenazas de los trabajadores en el culo de los señores clientes. Los usuarios de El Prat son carne de cañón, despojos humanos, el eslabón más débil del negocio, basura que puede ser zarandeada y pisoteada porque según la que manda en el comité de huelga, las colas son un arma cargada de futuro.
Todo esto presenta una gran ventaja para los líderes del proceso, que hurgan en la herida de un Estado acomplejado y que pasa de puntillas por Cataluña para no ofender demasiado. Como tanto da que da lo mismo, el megaconsejero Jordi Turull se muestra escandalizado y dice que lo del caos aeroportuario es de "vergüenza ajena". En un alarde de actitud constructiva, Turull ya ha anunciado que trasladará a consulados y embajadas que todo este cirio, con una republiqueta, no pasaría y que si la Generalitat tuviera las competencias se iban a enterar, quienes sean, de lo que vale un peine. Lo mismo la alcaldesa, quien tras no hacer nada con los ataques al turismo, ha declarado que Barcelona no se puede permitir un aeropuerto colapsado.
A todo esto, don Mariano está dispuesto a hacer política en Cataluña, que no es que el aeropuerto funcione como un reloj ni que sea para que se calle Turull, sino montar la escuela de verano del partido en septiembre y en Salou. Carmen del Riego avanza el enorme acontecimiento en La Vanguardia: "Esta vez no sólo habrá el recurso a la justicia –al contrario de lo que ocurrió en el 9-N– para contrarrestar el referéndum que pretenden convocar los independentistas catalanes para el 1 de octubre. Habrá también política y con un doble objetivo: hacer pedagogía, y que se entienda la postura del Gobierno y el PP en la prohibición de la consulta, para que no sólo se escuche una voz en el debate político catalán, la de los secesionistas, pero también para preparar el escenario posreferéndum y que los catalanes puedan comprender que hay vías de salida a la situación política actual".
Y: "Con este fin, Mariano Rajoy y toda la cúpula del PP desplegarán una intensa actividad política en Catalunya coincidiendo con el inicio de la campaña del referéndum, que las asociaciones independentistas han fijado para el 15 de septiembre. Ese fin de semana de septiembre, el PP en pleno, con Rajoy, la secretaria general, María Dolores de Cospedal, los vicesecretarios, y otros líderes populares, además de algún ministro, en especial la representante catalana en el Gobierno, Dolors Montserrat, se concentrarán en Salou (Tarragona), porque el PP ha decidido llevar a Catalunya su escuela de verano".
Se agrava el drama venezolano. Maduro ha destituido a la fiscal Ortega y sofocado una extraña rebelión militar. Alfredo Meza firma la crónica en El País sobre la última hora en el destrozado país: "El chavismo consiguió sofocar ayer la primera rebelión en el seno del Ejército venezolano en tiempos recientes. Un grupo de 20 militares del Fuerte Paramacay, en la ciudad de Valencia, la tercera más grande del país, trató de sublevarse. Fue reducido por las fuerzas leales al presidente Nicolás Maduro. El asalto fallido se saldó con dos muertos y ocho detenidos, uno de ellos herido, según precisó horas después el propio Maduro. El número dos del régimen, Diosdado Cabello, que confirmó la sublevación y el fracaso de la misma vía Twitter, calificó a los asaltantes de “terroristas”. (...) El asalto fue dirigido por el excapitán de la Guardia Nacional Juan Caguaripano, en busca y captura por rebelión y traición desde hace tres años. Caguaripano escapó del enfrentamiento con parte de las armas y municiones de la base de Paramacay, la más importante de blindados del país".
7 de agosto, santoral: Cayetano, Sixto y Victricio.