Catalanes, Franco ha vuelto: 'Sleepy Hollow' en el Born
Semana decisiva en el PSOE. Iceta repite y repite que no a Rajoy. La balanza está entre designar 11 diputados peones o elecciones con Ángel Gabilondo
17 octubre, 2016 08:51"Franco aún presente", titula El Periódico de Cataluña. 80 años después del comienzo de la Guerra Civil y tras 40 bajo tierra, el fantasma ha levantado la cabeza. En realidad, le han levantado la cabeza, tal cual está la estatua ecuestre que se instalará en la explanada del Mercat del Born, donde una vecina tendió en el balcón una sábana en la que escribió: "No al Valle de los Caídos catalán".
Franco vuelve, pues, como La leyenda de Sleepy Hollow, el cuento de Washington Irving sobre un jinete sin cabeza. Los mandos de la Generalitat están soliviantados. Neus Munté, que no sale de Montjuïc entre homenajes a Companys y postureo justiciero, asegura toda ufana lo siguiente: "El Estado no pide perdón, el Govern no pedirá permiso". Quieren anular los juicios de la dictadura franquista. Excelente causa. Lástima que los muertos no resuciten. El "relato" es que la Guerra Civil fue el último episodio de una España contra Cataluña desde los albores de la vida en el planeta. Mas sostiene que la sombra del caudillo es alargada y no es que Franquito fuera un ciprés.
La manoseada y manida causa provocará un nuevo choque de la Generalitat contra el aire, pero suma mucho y cala bien en la táctica de desacreditar al Estado y los tribunales en el proceso de ruptura. En el antecitado diario José Rico firma un reportaje sobre la persistencia de los símbolos franquistas en las calles. Ahí van un par de párrafos: "Aunque pronto llevará 41 años bajo una lápida de otros tantos kilos en el Valle de los Caídos, Francisco Franco sigue en la calle. Mañana regresará a Barcelona a lomos de su caballo como parte de la exposición 'Franco, Victoria, República. Impunidad y espacio urbano'. La muestra, impulsada contra viento y marea por el gobierno de Ada Colau, también incluye la instalación frente al Born de la estatua de la Victoria, elaborada por Marès en homenaje al triunfo franquista en la guerra civil".
Sigue: "En este caso son solo dos esculturas que se exhibirán temporalmente para reivindicar la memoria histórica y luego volverán a ser recluidas. Pero el dictador y su régimen sobreviven aún hoy en el paisaje de un buen puñado de ciudades y pueblos de Catalunya, aunque la mayoría de huellas suelen pasar inadvertidas para el común de los mortales porque forman parte de la fisonomía cotidiana".
¿Qué, que no? Porque no nos damos cuenta y sólo vemos las esteladas, pero todo está lleno de yugos y flechas y guiños al franquismo como esas placas del Instituto Nacional de la Vivienda. Conclusión: Franco está vivo y se codea con Elvis y Michael Jackson en una isla para desaparecidos vip en el Caribe. Y a todas estas, Puigdemont, que denunciará a un loco que le ha amenazado de muerte por Facebook, se ha ido a París. Sostiene que dentro le oyen pero fuera le escuchan.
Todo forma parte del precalentamiento de una gran movilización para cuando comience el juicio de Mas, Joana Ortega e Irene Rigau sobre el primer 9-N. El segundo avanza a pesar de los presupuestos virtuales y gracias, en parte, a las calmas ecuatoriales de la política nacional. Contra la mayoría de los pronósticos, Miquel Iceta ha ganado las primarias y se ratifica en que "sus" diputados votarán no a la investidura de Mariano Rajoy. En tal tesitura, abstención o elecciones, el PSOE tiene un plan B, según la información de Daniel Basteiro en El Español: "En medio de la zozobra, un nombre comienza a sonar con fuerza. Tal y como reveló este diario hace dos semanas, la figura de Ángel Gabilondo es ensalzada como una posible solución de emergencia en caso de que la rebelión contra los barones vaya a más y convierta en otro tumulto la reunión del Comité Federal".
Continúa: ""Son todo ventajas", explica un miembro del Comité Federal. "Como independiente no tendría que presentarse a primarias, así que nos evitamos la tentación de regresar de Pedro. Si todo va mal y vamos a terceras, tampoco habría mucho tiempo para celebrarlas. Pero además Gabilondo es un buen cartel, lo hizo muy bien en la Comunidad de Madrid y probablemente nos ayudaría a salvar los muebles", razona. Según algunas fuentes, Gabilondo se deja querer. "Hay cosas que el PSOE no puede conseguir. Para todo lo demás, Ángel Gabilondo", ironizan algunos, recordando el célebre anuncio de una tarjeta de crédito. Gabilondo es citado en numerosos círculos como figura de prestigio social y, lo más importante, alejado de las luchas intestinas y orgánicas del PSOE que decepcionan a los votantes".
Así pues, el que se mueve no sale en la foto y Gabilondo es un prodigio de quietud. Aflora el PSOE del clan de la tortilla, Felipe y Guerra. Son los de la abstención táctica. Salen en la portada de El País, en la que Anabel Díez y José Marcos arrancan su crónica sobre el desbarajuste socialista: "Tanto en el comité federal del PSOE como en el grupo parlamentario hay mayoría suficiente, según fuentes del partido, para descartar unas terceras elecciones y facilitar con una abstención la investidura del líder del PP, Mariano Rajoy, como presidente del Gobierno. Pero según pasan los días, en la gestora socialista y entre los líderes territoriales cercanos a ella aumenta la preocupación por la división que está generando en la militancia esa posible abstención. La gestora todavía no ha puesto fecha a la decisiva reunión del comité federal, aunque sus integrantes dan por seguro que se demorará hasta el domingo, solo un día antes de que el Rey comience la ronda de contactos con los representantes parlamentarios. Para entonces, los impulsores de la abstención tendrán más afianzada su estrategia, pero admiten que una medida tan traumática puede dejar una profunda huella en el partido".
Más franquismo. Como es sabido, los Juegos Olímpicos de 1992 fueron un constante homenaje al sucesor del antepenúltimo jefe del Estado a título de Rey, el ahora emérito Juan Carlos. Los aros olímpicos omnipresentes, como las cuatro barras, en una combinación subliminal de símbolos que superpuestos generaban el mismo efecto españolizante en las masas que el yugo y las flechas. En La Vanguardia aún se acuerdan y le dedican el suplemento local de Barcelona a la nominación de Barcelona como sede de los Juegos. Y en el Abc, donde Anna Cabeza firma un texto sobre la desmemoria histórica de Colau para algunas cosas: "Ni tan solo una conmemoración institucional. Barcelona celebra hoy el 30 aniversario de su designación como sede de Juegos Olímpicos de 1992 sin recuerdo alguno al día que cambió la vida de la ciudad y ninguneando ese momento histórico así como la figura de quien más ayudó a que el sueño olímpico se hiciera realidad, la del fallecido expresidente del Comité Olímpico Internacional (COI), el catalán Juan Antonio Samaranch".
Más: "Barcelona, de hecho, lo había intentado sin éxito en anteriores ocasiones pero no fue hasta el 17 de octubre de 1986 cuando el propio Samaranch anunció que era la elegida para los Juegos de 1992. El trabajo forjado entre el líder del COI con el alcalde de entonces de Barcelona, Pasqual Maragall, como con su antecesor, Narcís Serra –que en ese momento era ministro de Defensa–, dio sus frutos. Su «¡À la ville de... Barcelona!» lanzado desde Lausana (Suiza) a las 13:32 horas de ese viernes llenó de felicidad e ilusión a los barceloneses, cambió la historia y el rumbo de la ciudad y la situó en el mapa mundial".
Paparruchas. Ni Maragalles ni Samaranchos, Barcelona comienza con Colau, a la que han nombrado copresidenta de la ONU de las ciudad (hay diecisiete presidentes) y terminará con Colau. Es decir, o Colau o Barcelona, sólo puede quedar una. Debe estar de regreso de Bogotá, donde ha seguido urdiendo planes para acabar con la Sagrada Familia y echar a todos los guiris turistas.
17 de octubre, santoral: Ignacio de Antioquía, Florencio y Oseas, profeta.