Pedro Duque, ¿a favor o en contra de la quiropráctica?

Pedro Duque asumió hace semanas que es “más difícil” ser ministro que astronauta. Poco después de aceptar la cartera de Ciencia, Innovación y Universidades salieron a la luz posibles irregularidades de la sociedad patrimonial que creó en 2005. Y, ahora, es noticia por sus incongruencias sobre la quiropráctica. ¿Está a favor o en contra el ministro Duque de esta profesión?

En 2006, Duque participó en el Simposio Internacional de la ICA (Asociación Internacional de Quiroprácticos, por sus siglas en inglés) que se celebró en Madrid. Durante su intervención en la cena de gala del evento, el astronauta, además de hablar de los viajes espaciales y de la investigación, se dirigió a los quiroprácticos, a quienes animó a tratar de participar en el programa espacial por los beneficios que sus servicios podrían tener para los astronautas, cuyos cuerpos sufren traumas durante el entrenamiento y las misiones.

Cambio de opinión

En esa cena también estuvieron los padres del hoy ministro que, por cierto, son partidarios incondicionales de la quiropráctica y fundadores de la Asociación Española de Pacientes de Quiroprácticos. Hay que añadir que ese simposio se organizó de la mano de la Asociación Española de Quiropráctica (AEC), que ya entonces trabajaba por el reconocimiento de la quiropráctica como profesión sanitaria.

Pasados los años, ya como ministro y en el inicio de la carrera electoral del 28A, Duque ha cambiado de opinión. En una entrevista concedida a 20 minutos el pasado 29 de marzo, el astronauta duda ahora de los beneficios de la quiropraxia. Cuestionado por la asociación que presidió su madre en este campo, expresa que “nadie está libre de que, con referencias de otras personas, pueda llegar a creer que existen modos de tratar las enfermedades que funcionan mejor que lo que da el sistema de salud”.

Las terapias naturales, a debate

“Todos podemos caer”, apostilla. Considera ahora Duque que los beneficios de la quiropráctica están en la cabeza del paciente, en el “a mí me funciona”: “El problema es que si no tienes la información correcta por parte de alguien que pueda basarse en hechos concretos puedes creer que es ahí adonde hay que acudir en vez de al médico”.

Y, preguntado justo antes por las terapias naturales, dice que “si nadie ha podido demostrar que [algo] cura es lógico que no se oferte” en el Sistema Nacional de Salud. Las incongruencias del ministro.