El independentismo, en un acto de la ANC en Bruselas, con la participación del exconsejero Toni Comín /Efe

El independentismo, en un acto de la ANC en Bruselas, con la participación del exconsejero Toni Comín /Efe

Política

El independentismo irredento pide paso: “Preparémonos para el sacrifico”

Torra y Comín buscan una reacción tras la sentencia del Tribunal Supremo que recupere la vía insurreccional del independentismo

17 febrero, 2019 18:45

El debate se intensificará en las próximas semanas con las distintas convocatorias electorales. Pero los mensajes de los independentistas más irredentos es claro: “Preparémonos para el sacrificio”, y “olvidemos la palabra atrás”.

El independentismo vive un marasmo interno, con diferentes estrategias. Los más atrevidos, los que creen que se debería apretar el paso, reclaman cambiar la mentalidad. Entre ellos figura el propio presidente de la Generalitat, Quim Torra, como se comprobó este sábado, en la manifestación por las calles de Barcelona. Torra ha insistido este domingo, al señalar que se debe producir “un cambio de actitud de los catalanes”, lo que se mostró en esa concentración. “He decidido borrar la palabra ‘atrás’ del diccionario, ya no se puede ir atrás, la debemos borrar, borremos esa palabra”, ha asegurado.

Manifestación independentista en Barcelona a favor de la autodeterminación /CG

Manifestación independentista en Barcelona a favor de la autodeterminación /CG

Manifestación a favor de la libertad de los políticos presos en Barcelona/ CG

Sacrificio y compromiso

Y desde Bruselas, en un acto de la ANC, el exconsejero Toni Comín, ha ido más lejos al pedir que, después de la sentencia del Tribunal Supremo los catalanes deberían reaccionar: “Preparémonos psicológicamente, porque el sacrificio, la movilización y el compromiso más grande no han llegado”.

¿Tiene ese sector la primacía del movimiento? No, si se atiende a las encuestas y a la posibilidad de que Esquerra Republicana de Catalunya comience a ser el partido hegemónico en ese campo. Pero en el seno de Esquerra también hay diferencias, y todo el aparato partidista que se articula alrededor de Carles Puigdemont tratará, precisamente, de ganar la partida a ERC. Comín, por ejemplo, fue elegido diputado en las listas de ERC, y formó parte, como consejero de Salud de un gobierno de Carles Puigdemont, dentro de la disciplina de Esquerra. ¿Es representativo Comín de la corriente principal de Esquerra?

El presidente de la Generalitat, Quim Torra (d), el expresidente catalán Carles Puigdemont (c), y el exconseller de ERC huido a Bélgica Toni Comín / EFE

El presidente de la Generalitat, Quim Torra (d), el expresidente catalán Carles Puigdemont (c), y el exconseller de ERC huido a Bélgica Toni Comín / EFE

Comín, Puigdemont y Torra, en una imagen tomada en Bruselas

La sobreactuación de Artadi

Todo está en ebullición, pero los dirigentes de las entidades independentistas, de la ANC y Òmnium Cultural, no quieren tirar la toalla. Consideran que se brinda una posibilidad real de nuevas movilizaciones y agitaciones en función de la sentencia del Tribunal Supremo, cuyo juicio a los políticos presos acaba de iniciarse. Se apreció en los discursos al final de la concentración de este sábado, con sobreactuaciones, como la de la consejera Elsa Artadi, asegurando que le daba “vergüenza” la posición de la Comisión Europea, y dispuesta a entrar al choque con la propia Unión Europea y el Gobierno español, a pesar de haber negociado en los últimos meses con él.

Más allá de los discursos atrevidos, porque todos están en campaña electoral, lo que denota el independentismo es que no considera que cometiera ningún error en el otoño de 2017. En todos los discursos de miembros del Govern y de las entidades soberanistas, se pudo escuchar un rotundo “lo volvería a hacer”, que deja en entredicho la política del diálogo que ha propugnado el Gobierno de Pedro Sánchez, avalada por el PSC.

Derrotar al Estado

Las palabras de Comín son ilustrativas. El exconsejero ha considerado que la sentencia del Supremo supondrá para el Estado como “abril del 1939, el final de la partida”. Una partida, sin embargo, que no se ha acabado, a su juicio: “Debemos demostrar al Estado español que somos capaces de derrotarlos, por muchas sentencias injustas que puedan dictar”.

Tras mostrar su “orgullo” por la actitud de los políticos presos –él se fue, como Puigdemont y otros consejeros a Bruselas-- Comín ha insistido en preparar grande movilizaciones, constantes, con la idea de mantener viva la opción rupturista del independentismo.

Esa es la realidad en estos momentos. Es decir, pudiera ocurrir que las direcciones de los partidos intentaran reconducir el movimiento, con la idea de gobernar y esperar mejores tiempos, con mayorías sólidas para plantear al Gobierno español de turno una negociación, y que fueran superados por el fervor de los independentistas de base, articulados en esas entidades. En cualquier caso, los propios responsables políticos, como Torra, alientan esa posibilidad.