El presidente de Junts, Carles Puigdemont, en el espacio Les 5 Éléments de Perpiñán, anunciando la ruptura de su pacto con el PSOE
Puigdemont emplaza a Sánchez a decir cómo va a continuar en Moncloa: "Podrá ocupar poltronas, pero no gobernar"
El líder de Junts confirma que su partido ejercerá de oposición en el Congreso y redobla sus reivindicaciones secesionistas
La militancia de la formación posconvergente deberá refrendar la ruptura con el PSOE en una votación interna este miércoles y el jueves
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El expresidente de la Generalitat y líder de Junts per Catalunya, Carles Puigdemont, ha ratificado esta tarde la ruptura de su partido con el PSOE, al que acusa de no haber cumplido los acuerdos firmados hace dos años con los posconvergentes en Bruselas a cambio de apoyar la investidura de Pedro Sánchez como presidente.
Puigdemont, fugado de la justicia por el golpe secesionista de octubre de 2017, ha anunciado que su partido --hasta ahora socio parlamentario de los socialistas-- pasará a la oposición en el Congreso. Aunque, al mismo tiempo, ha insinuado que tampoco se sumará a una moción de censura alternativa: "No apoyaremos a ningún Gobierno que no apoye a Cataluña, ni a este ni a ningún otro", ha manifestado, en alusión a la obligación de tener que cumplir sus exigencias secesionistas.
"Sólo les mueve el tacticismo por el poder"
Puigdemont ha comparecido ante los medios tras concluir la reunión de la dirección de Junts en Perpiñán, donde se ha decidido de forma unánime la ruptura con el PSOE. Y ha basado su discurso, de tono agrio y crispado, en desgranar la larga lista de incumplimientos cometidos --según él-- por los socialistas, y en recordar los supuestos agravios históricos del Estado respecto a Cataluña.
El líder de Junts ha acusado al PSOE de moverse sólo por "tacticismo" para mantenerse en el poder, acusándole de no tener "voluntad de cumplir lo pactado". "Podrán ocupar poltronas, pero no gobernar", ha espetado. Y ha emplazado al presidente, Pedro Sánchez, a explicar cómo piensa continuar a partir de ahora en La Moncloa.
"Nosotros hicimos todo lo que tocaba para que ese acuerdo se cumpliera. Pero el PSOE ha ignorado su debilidad parlamentaria y nuestros avisos en los 19 encuentros que hemos tenido en Suiza", ha dicho. "El pacto está roto. Los acuerdos siguen pendientes de ejecución en tiempo y forma", ha enfatizado.
Incumplimientos
Puigdemont ha recordado que, entre esos acuerdos firmados por Junts y el PSOE en octubre de 2023, figura la publicación de las balanzas fiscales: "Seguimos sin tenerlas", ha lamentado. Ni tampoco las cifras de ejecución presupuestaria del Estado en Cataluña, para evaluar si se cumplen. Dos condiciones que, según ha destacado, eran indispensables para negociar los actuales Presupuestos Generales.
Puigdemont se ha quejado del, a su juicio, mal funcionamiento de los servicios públicos nacionales en Cataluña --citando entre esos ejemplos el caso de la red de Rodalies (Cercanías) de Renfe--; y también de la falta de datos sobre la inversión del Estado en infraestructuras como el aeropuerto y el Puerto de Barcelona: "¿Qué se gasta el Estado en el de Barajas? No lo sabemos. ¿Dónde va el dinero?", se ha preguntado.
Otro tanto ocurre, según él, con el compromiso de que Cataluña tenga presencia ante organismos internacionales. Y con el hecho de que el Gobierno no haya desclasificado documentos "para saber qué pasó" en los atentados yihadistas de Barcelona y Cambrils de agosto de 2017, entre otras exigencias.
"Vigencia y validez" del referéndum ilegal y la DUI
El líder de Junts ha empezado su alocución reivindicando la "validez, vigencia y legitimidad" del referéndum ilegal y unilateral de secesión de Cataluña del 1 de octubre de 2017, así como de la posterior declaración unilateral de independencia (DUI) del Parlament del 27 de ese mismo mes. Unas consideraciones que, según ha recordado, así hizo constar en el acuerdo con el PSOE de Bruselas de 2023; considerando, eso sí, las "profundas discrepancias" que les separaban.
Acto seguido, el fugado ha dado paso a su discurso más ultranacionalista: "La dependencia de España tiene unos costos insostenibles: más pobreza, menos recursos para los catalanes; ausencia de una política fiscal justa; pésima cultura democrática; desinversión crónica; mal funcionamiento de los los servicios públicos estatales; falta de palancas en vivienda, sanidad y tercer sector; falta de natalidad, y de competencias en inmigración; y una desprotección alarmante de la lengua catalana", ha manifestado.
Puigdemont, asimismo, ha acusado a ERC de ser poco exigente con el PSOE --"para hacer lo mismo que otros, nosotros no somos los socios que buscan"--; y ha atribuido al PSC una supuesta "alianza" con PP y Vox para "impedir avances" en clave identitaria. En este punto, ha puesto como ejemplo la --según sus palabras-- "españolización" de los Centros de Atención Primaria (CAP), la "descatalanización de las instituciones" y, de nuevo, lo que llama "desprotección de los catalanohablantes", así como la "pasividad" de los socialistas catalanes ante la "desinversión del Estado y el colapso de los servicios públicos".
"Orgulloso" de la "catalanización" de La2
Puigdemont, por último, se ha mostrado "orgulloso" de los acuerdos que el PSOE sí ha cumplido con Junts. Entre ellos, "la catalanización" de La2 de RTVE en Cataluña; el uso del catalán en el Congreso; la obligatoriedad de las grandes empresas atender a los clientes de Cataluña en catalán; y otros logros como, por ejemplo, la aprobación de la Ley ELA, o el freno a la subida de la cuota de los autónomos y al impuesto sobre las mutuas sanitarias.
La militancia de Junts deberá refrendar ahora la ruptura de su partido con los socialistas en una votación interna que se celebrará entre el miércoles y el jueves próximos.
