La Flotilla fue un negocio redondo para Pilar Castillejo. La diputada de la CUP no solo cobró íntegramente su sueldo durante los 35 días que estuvo ausente de su puesto de trabajo en el Parlament –algo que no escapó la polémica en redes sociales y en algunos medios de comunicación– sino que aumentó su salario más de un 60% al convertirse en la presidenta de su grupo parlamentario mientras se dirigía a Gaza con la intención de abrir un corredor humanitario, una maniobra que fracasó.
Los anticapitalistas así lo anunciaron el pasado 29 de septiembre, días antes de la detención de la nueva líder del partido en la Cámara catalana y de otros tantos políticos y activistas por parte del Gobierno de Israel. Y fue una decisión sorprendente, pues quien aparentemente debía tomar el relevo de Laia Estrada, que dimitió en junio pero no entregó su acta hasta el inicio del presente curso político, era Laure Vega, hasta entonces más conocida que la exconcejal del Ayuntamiento de Ripollet.
El plan de la CUP era aprovechar el tirón mediático de Castillejo, recibida en el Debate de Política General con una ovación mayoritaria por parte del resto de diputados. Apuntan algunas fuentes, asimismo, que el ascenso fue una muestra de "agradecimiento" por su labor en la Flotilla, que "consiguió remover conciencias" como se vio en las manifestaciones que se celebraron en Barcelona durante los días posteriores a la deportación de los integrantes de la misma. Mientras, la formación argumenta que forma parte de la participación coral de todos sus diputados en relación con la actividad parlamentaria.
Un 'premio' de 41.104 euros
El sueldo base de un diputado por Barcelona en el Parlament de Cataluña es de 50.722 euros anuales divididos en 14 pagas, a lo que se suma, confirman desde la propia Cámara, una indemnización por gastos de viaje, independientemente de que se amorticen o no, de 14.264 euros al año. El premio o complemento de este salario por ser presidente de grupo, que es el mismo tenga éste 40 o cuatro diputados, como es el caso de la CUP, es de 41.104 euros, ascendiendo el sueldo de Castillejo de 64.986 euros anuales a 106.090. Es decir, más de un 60% más de lo que cobraba antes de la Flotilla.
Su ausencia, contemplada en el reglamento
Pese a la intención de grupos como PP y Vox de suspender a la diputada por no acudir a la Cámara durante los 35 días en que estuvo embarcada, el reglamento sólo contempla sanciones de este tipo a partir de ausencias no justificadas en tres sesiones plenarias consecutivas o cinco alternas en un mismo período de sesiones. Por lo que el hecho de que Castillejo se ausentara durante el primer pleno del curso no puede acarrearle ningún tipo de perjuicio a nivel económico, según las leyes de la propia Cámara, pese a que desde el punto de vista moral se haya puesto en duda si debería o no cobrar pese a no acudir.
