La exalcaldesa de Barcelona, Ada Colau, Europa Press
Los Comuns, sin plan B: Colau regresará en 2027 para su último envite con Collboni
Janet Sanz, Bob Pop y Gerardo Pisarello tenían puestas sus esperanzas en la retirada definitiva de la exalcaldesa para ser cabezas de lista en las próximas elecciones al Ayuntamiento de Barcelona
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No hay nada confirmado, pero todas las pistas apuntan en la misma dirección. Salvo sorpresa, Ada Colau volverá a presentarse a las elecciones al Ayuntamiento de Barcelona en 2027. Es la intención que la exalcaldesa habría expresado a sus compañeros de partido, que ayer cambiaron el código ético para facilitar el trámite, y también la opción de mayor consenso en el seno de los Comuns, que siguen confiando en su capacidad para disputar la alcaldía al socialista Jaume Collboni.
Su protagonismo en la Flotilla, que pese al fracaso del corredor humanitario que pretendían abrir en Gaza desencadenó manifestaciones masivas en Barcelona por su "captura" en aguas internacionales, ha sido solo un impulso más de los que la exalcaldesa prepara para llegar en condiciones al envite. Su participación en las tertulias de Els Matins de TV3 también tiene este objetivo: reivindicar las políticas llevadas a cabo en sus dos mandatos al frente del consistorio y prepararse para los dos años que le quedan todavía según la nueva normativa interna de los Comuns, que permite hasta 12.
Pisarello se ofreció al partido
El plenario del partido aprobó la medida con un 82% de apoyo, exponiendo un claro consenso en torno a la figura de Colau que limita las aspiraciones de, por ejemplo, el diputado en el Congreso y secretario primero de la Mesa Gerardo Pisarello, que se habría ofrecido a sustituir a la alcaldesa como cabeza de cartel en Barcelona según explican algunas fuentes. Fue teniente de alcalde en la primera legislatura de los Comuns en la capital catalana, pero optó por marcharse a Madrid en 2019.
La opción Bob Pop, descartada
El polémico humorista madrileño Roberto Enríquez Higueras, más conocido como Bob Pop, también ha hecho pública en las últimas semanas su intención de presentarse como candidato. Pero la opción no ha sido realmente contemplada en ningún momento por el partido, que conoce la dificultad de una plaza como Barcelona, donde se requiere de un líder reconocible para obtener un resultado que, siempre después de llegar a acuerdos con otros, dé opciones a los Comuns de gobernar de nuevo.
Janet Sanz se marcha en diciembre
La opción de la actual presidenta del grupo municipal también quedó truncada tras el anuncio de su despedida, que se hará efectiva en el último pleno del período de sesiones, en diciembre. Pese a que Janet Sanz asegura que su adiós ya estaba decidido antes de que Colau dejara su acta, muchos la veían como la sustituta ideal. Y habría sido la noticia del regreso de la exalcaldesa, apuntan, lo que habría motivado su intención de dejar la política tras más de 13 años en el ayuntamiento, primero como concejal de Iniciativa per Catalunya, y desde 2015 en representación de los Comuns.
Sin candidatos a la vista
La crisis de candidatos, que parece al fin resuelta en el seno de la formación morada, sigue a la orden del día en el resto de partidos. Collboni repetirá para los socialistas, pero las dudas se apoderan de las demás formaciones. Junts sigue sin decidir el relevo de Xavier Trias a expensas de encontrar un líder externo que les permita igualar el resultado del exalcalde en las elecciones de 2023.
Dos de sus actuales concejales, Josep Rius y Jordi Martí Galbis, tratan de obtener el visto bueno de Waterloo, que no parece verlo claro y duda de la capacidad de ambos para mantener la actual representación del partido en Barcelona.
Dani Sirera también parece que seguirá, pero siempre es uno de los nombres que más suena para relevar a Alejandro Fernández en el seno del PP catalán, y su afinidad con Alberto Núñez Feijóo podría hacerle recalar en Madrid si los populares alcanzan la Moncloa tras los próximos comicios generales. Gonzalo de Oro (Vox) y Elisenda Alamany (ERC) también podrían cambiar de frente próximamente; y Aliança Catalana, que según los sondeos estaría ya en condiciones de entrar, tampoco tiene un liderazgo claro y reconocible en la capital catalana más allá de un Jordi Amela que no convence a Sílvia Orriols.
Revancha
El plan de Colau, visto lo visto, pasaría por convertir las próximas municipales en un cara a cara donde la ciudadanía tuviera que elegir entre su propuesta y la del actual alcalde. Una revancha sin un alcaldable alternativo con opciones reales de asumir la vara de mando de la ciudad. Ese es el escenario soñado para los Comuns tras la derrota en 2023, y no hay plan B. Por ahora, las limitaciones técnicas han desaparecido del código ético. Y es cuestión de tiempo que se anuncie la decisión.
