Salvador Illa, presidente de la Generalitat, en el Debate de Política General del Parlament en el segundo año de la legislatura
El PSC se mantiene firme ante la presión de Junts y rechaza asumir los acuerdos de Bruselas
Los neoconvergentes ofrecían estabilidad a cambio de que el Govern se implicara en el impulso de un nuevo referéndum
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La tercera sesión del Debate de Política General (DPG) en el Parlament ha generado fricción con el esperado encontronazo entre PSC y Junts tras los votos en contra de los socialistas a la propuesta que pretendía reabrir el fantasma del referéndum de "autodeterminación".
El partido de Carles Puigdemont ha planteado este jueves que en la mesa de negociación que tiene abierta con el PSOE en Suiza se aborde, de forma explícita, la celebración de un nuevo 1-O en Cataluña. Ello, a cambio de contribuir a la estabilidad de la legislatura de Salvador Illa.
Un “no” rotundo
En pleno clima de distensión y cohesión de la izquierda, el PSC ha votado en contra de la propuesta, dejando meridianamente claro que mantienen su rechazo a repetir un nuevo referéndum en Cataluña.
Los socialistas se han negado a pasar por el aro, pese a las peticiones de los neoconvergentes para que asuman como propio los acuerdos de Bruselas, en los que se mencionan la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatut, la consulta del 9 de noviembre, el referéndum del 1 de octubre y la aplicación del artículo 155 de la Constitución Española.
Salvador Illa, presidente de la Generalitat, en el Debate de Política General
Bloque minoritario
El bloque independentista sigue acumulando fracasos tras los resultados de esta última jornada del DPG en su propuesta de resolución estrella. Un total de 70 votos en contra —del PSC, PP, Vox y Aliança— y 65 a favor (Junts, Esquerra, los comunes y la CUP) han tumbado los planes de la formación de Puigdemont.
La amnistía, también sobre la mesa
La propuesta por el reconocimiento del conflicto en Cataluña no es la única medida espinosa para el PSC. En el paquete de propuestas con el que Junts pretende mover las piezas del tablero catalán, los neoconvergentes han sacado a la palestra temas sensibles como la amnistía.
El grupo parlamentario socialista se ha vuelto a mostrar crítico con la propuesta y ha votado en contra de dicho texto, que llamaba precisamente a inmiscuirse en la cuestión presionando al Gobierno. Cabe destacar que Illa ya abrió su discurso de más de una hora y media el martes deseando la vuelta inmediata del expresidente de la Generalitat, aún en Bruselas.
Junts, muy críticos con Illa
Mònica Sales, portavoz Junts en el hemiciclo, se ha mostrado muy crítica con la gobernanza de Illa: “Ha perdido el norte”, ha subrayado, a la vez que ha apuntado al presidente Sánchez y los comunes como responsables del “retroceso a marchas forzadas” de Cataluña bajo el mandato del PSC.
Sales ha clamado por desbloquear las "cuestiones que impiden progresar" y que, según su criterio, deberían resolverse para garantizar las libertades de los catalanes. Asimismo, ha pedido a los socialistas que no “frenen los avances sociales y económicos junto a PP y Vox” --en referencia al movimiento independentista-- y muestren coherencia: “No se puede jugar a dos bandos”.
Junts ha buscado mantener viva la agenda soberanista en un contexto en el que el pragmatismo parece imponerse. El PSC, por su parte, se ha aferrado a no cruzar ciertas líneas rojas y evitar alimentar un debate que, aunque recurrente, sigue marcando la frontera entre ambos mundos políticos.
