Antonio Baños Barcelona
¿Qué fue de Antonio Baños? El nieto de anarquistas que aupó el 'procés' y hoy señala a comercios por no atender en catalán
Su trayectoria va desde la radio y la escritura de libros hasta convertirse en un referente del independentismo combativo
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Antonio Baños, el exdiputado de la CUP, vuelve al centro de la controversia. En las últimas horas, ha señalado a una heladería ubicada en Barcelona, Dellaostia, como “nuestro enemigo”. ¿El motivo? El pasado domingo, 17 de agosto, atendieron en castellano a la pareja de un concejal de ERC, Guillem Roma, lo que derivó en una fuerte discusión.
El negocio, fundado por un emprendedor argentino en 2022, sufrió pintadas en las que le acusaban de "fascista", carteles y una avalancha de reseñas negativas por parte de los independentistas. Baños, muy activo en X (anteriormente Twitter), no tardó en reaccionar y animar a su parroquia a hostigar el negocio “hasta que cierren”. ¿Cuál ha sido su trayectoria dentro y fuera de la política?
Sus primeros años
El exdiputado autonómico nació en el distrito barcelonés de Nou Barris. De un abuelo falangista y otro anarquista de la CNT, desde joven ya se interesó por la comunicación y la cultura. Se licenció en Ciencias de la Información por la Universidad Autónoma de Barcelona, por lo que también ha desarrollado su carrera como periodista.
Ha trabajado en medios escritos y en radio, como en RNE, El Periódico, La Vanguardia o la Cadena Ser. Además, es autor de tres libros de economía: La economía no existe (2009), Posteconomía (2012) y La rebelión catalana (2014).
Alcanzó cierto renombre por la calidad de sus textos antisistema, lo que le abrió la puerta de la política.
Salto a la política
Hasta julio de 2015 no figuró como cabeza de lista de la CUP en las elecciones autonómicas para el Parlamento de Cataluña, en las que resultó elegido. Su lista logró 10 escaños y situó a la formación anticapitalista en el centro de la negociación para la investidura de Artur Mas, a la que se negó.
El veto a Mas abrió la puerta a Puigdemont. Baños votó entonces a favor de investir presidente de la Generalitat al antiguo alcalde de Girona. En una semana, renunció a su escaño alegando discrepancias con la estrategia de la CUP. Más tarde, siguió en la plataforma Súmate, entidad promovida por el nacionalismo para extender su plan rupturista entre los catalanes castellanohablantes. Ya no forma parte de la misma.
En primera línea mediática
En 2018, entró en el Consejo Asesor para el Debate Constituyente, un órgano consultivo dedicado a fomentar el debate sobre el proceso secesionista de Cataluña.
A pesar de que abandonó el acta de diputado hace casi una década, su discurso y sus salidas de tono le mantienen en la primera línea mediática. Periodista amante confeso del papel, Baños ha tenido que adaptarse a las redes sociales, donde destaca por sus frases cortas y polémicas.
También se ha convertido en una figura recurrente de tertulias, actos y plataformas ligadas al independentismo, donde ejerce de agitador ideológico. Entre sus frases más conocidas figura: "Soy un auténtico catalán, es decir, con cuatro abuelos de fuera de Cataluña”,
Alejado de la política
En febrero de 2019, Antonio Baños (como Eulàlia Reguant), actuando como testigos en el juicio a los políticos catalanes que lideraron el procés, se negó a contestar las preguntas de Vox, que ejercía la acusación popular. El presidente de la sala, Manuel Marchena, le advirtió de las consecuencias legales de su decisión y le impuso una multa de 2.500 euros.
Diez años después de presentarse a las elecciones al Parlament, prefiere mantener una vida alejada de la política, dedicada a la lectura y a pasar tiempo con los suyos.