Un registro de la Guardia Civil en el marco del 'caso Voloh'
Archivado definitivamente el 'caso Voloh' al no recurrir nadie
La causa por la trama rusa del 'procés' queda en nada al vencer el plazo de impugnación de las acusaciones particulares
Más información: Carpetazo a la trama rusa del 'procés'
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La macrocausa judicial que investigaba la trama rusa del procés independentista en Cataluña ha quedado archivada definitivamente al no recurrir nadie el carpetazo de la Audiencia de Barcelona.
El caso por la injerencia rusa en el desafío independentista ha muerto este miércoles, 15 de enero, al vencer el plazo de recurso de las acusaciones particulares. Llega al final del camino, pues, el mismo día en el que se jubila su juez instructor, Joaquín Aguirre.
Así lo han detallado fuentes internas de la Ciudad de la Justicia, que han confirmado a Crónica Global el archivo definitivo del llamado caso Voloh.
Nadie lo ha recurrido
El asunto fue abandonado por el juzgado de Instrucción número 1 de Barcelona el 20 de diciembre. Sin embargo, contra ese auto, cabía recurso.
No obstante, nadie ha impugnado la decisión, forzada en diciembre por la Audiencia Provincial, y la trama rusa deja de existir como caso judicial.
De este modo, con el carpetazo definitivo, no solo queda exonerado el president fugado Carles Puigdemont, sino que también se aplica el sobreseimiento para el resto de los acusados. Entre ellos, la empresa Iniciatives Events, que organizó varios actos políticos relacionados con el procés.
El inicio de la 'trama rusa'
Voloh nació en agosto del 2019, como una derivada de otra macrocausa: la que empezó en 2016 a raíz de las presuntas subvenciones irregulares de la Diputación de Barcelona destinadas a entidades afines a la extinta Convergència Democràtica de Catalunya (CDC).
Las conversaciones interceptadas entre Víctor Terradellas, exresponsable de relaciones internacionales de CDC, y los exdirigentes David Madí (CDC) y Xavier Vendrell (ERC) llevaron al juez Aguirre a ampliar la investigación.
Imagen de archivo de Carles Puigdemont
En octubre de 2020, el juez Aguirre ordenó una serie de registros y detenciones que revelaron diversas líneas de investigación. Entre ellas, destacaba la supuesta negociación del Govern del prófugo Carles Puigdemont con representantes rusos.
Según Aguirre, este supuesto acercamiento entre Vladímir Putin y Puigdemont incluía una oferta del Kremlin para enviar 10.000 soldados a Cataluña para apoyar su secesión.
Los tejemanejes del juez
En junio de 2024, la sección 21ª de la Audiencia de Barcelona se pronunció por primera vez, anulando la prórroga de la investigación y ordenando al juez Aguirre que enviara el caso a juicio con los indicios recabados hasta esa fecha o que lo archivara.
La provincial consideró que la investigación se había prolongado sin justificación, señalando que desde la anterior prórroga, en enero de 2023, hasta agosto de 2023, no se habían practicado diligencias ni se habían solicitado nuevas actuaciones.
Aguirre no se dio por vencido y días después del batacazo abrió otra pieza separada e imputó a los expresidentes de la Generalitat Carles Puigdemont y Artur Mas, a la exconsellera Elsa Artadi y al periodista Carles Porta, entre otros, y los acusó de traición. Un delito excluido de la Ley de Amnistía.
La Audiencia forzó el archivo
Fue así como en diciembre de 2024, la Audiencia de Barcelona se volvió a pronunciar y le ordenó finalizar la investigación sobre la supuesta injerencia rusa, advirtiéndole de posibles responsabilidades si persistía en desoír su resolución.
El tribunal, en uno de los fallos más contundentes de los últimos años, acusó al juez de actuar en "fraude de ley" al intentar prolongar la investigación mediante la apertura de nuevas piezas separadas sin aportar pruebas relevantes.
Esta decisión no ha sido recurrida y, por ello, la justicia da por cerrada esta controvertida investigación sobre la presunta financiación irregular del procés.
