El Parlament de Cataluña ha entregado este martes su medalla de oro al Monasterio de Montserrat, que este 2024 celebra su milenario, por "su trayectoria histórica" por haberse convertido, según la Cámara catalana, "en el principal icono de la identificación de un pueblo".
Al acto de entrega, celebrado en el auditorio del Parlament, han asistido el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, los miembros del Govern, el presidente de la Cámara, Josep Rull y el abad de Montserrat, Manel Gasch.
Aragonès, Pujol, Mas y Montilla, entre el público
Entre el público también figuraban los expresidentes de la Generalitat Pere Aragonès, Artur Mas, José Montilla y Jordi Pujol, además de los expresidentes del Parlament Anna Erra, Laura Borràs, Roger Torrent, Carme Forcadell, Núria de Gispert y Ernest Benach, además de los líderes de todos los grupos parlamentarios a excepción de los Comuns y la CUP.
En su intervención en el acto, Illa ha manifestado que la Diada es "una excelente oportunidad" para que los catalanes se "reencuentren" y dejen atrás "las distancias" que los alejan.
Para Illa, es un "honor" participar como president en la entrega de la medalla al monasterio y participar en la apertura de su milenario. Además, ha emplazado al monasterio a "ayudar" para "hacer una Cataluña más esperanzada, que anteponga la convivencia y el acuerdo a la discordia".
El abad reconoce "errores"
Por su parte, el abad de Montserrat, Manel Gasch, ha trasladado su "humilde agradecimiento" al Parlament por la entrega de la medalla, y ha afirmado que "a lo largo de 1.000 años también se cometen errores, pero todo ayuda a crecer si se reconoce y se acepta, y se hace con sinceridad".
La Escolania de Montserrat ha interpretado El virolai al inicio de la entrega de la medalla, así como el himno de Cataluña cuando ha finalizado.
Protestas a las puertas de la Cámara
En las puertas del Parlament, el premio ha sido recibido con cánticos de protesta de alrededor de unas 50 personas, entre ellas víctimas de la pederastia, que han criticado que la Cámara catalana "blanquee", según su opinión, abusos a menores de la Iglesia con la medalla de oro.
Entre los concentrados estaba Miguel Hurtado, víctima de abusos y primer denunciante de un caso en la Abadía de Montserrat en el pasado, para quien el acto en el Parlament supone un "acto de retraumatización secundaria por parte de las instituciones públicas".
"Las víctimas de pederastia clerical exigimos que el Parlamento retire la medalla de oro a Montserrat hasta que esta institución reconozca los hechos, no sólo los abusos, sino también el encubrimiento, e implemente un plan de reparación integral, con medidas de carácter material y simbólico, que beneficie a todas las víctimas", ha declarado a los medios.
Rechazo de los Comuns y la CUP
El grupo parlamentario de los Comuns no ha asistido al acto oficial de entrega de la medalla de honor, al considerar que se trata de una institución "que ha callado delante de los abusos y que no ha reparado a las víctimas".
En un comunicado, los comunes han trasladado todo su apoyo a las víctimas, han reclamado la revocación de la distinción al monasterio y han exigido que se vuelva a constituir la Comisión de Abusos de la Iglesia en la Cámara catalana.
La portavoz del Govern, Sílvia Paneque, ha respondido a la polémica con un mensaje de "apoyo a las víctimas", a la vez que ha reclamado "diferenciar" entre las personas concretas que perpetraron los abusos y la "institución global que merece el reconocimiento".