El nuevo president del Parlament de Catalunya, Josep Rull, ha explicado este martes que tuvo la primera noticia de que podría terminar desempeñando este cargo el sábado por la tarde, en una conversación con Carles Puigdemont y Jordi Turull, en la que le propusieron la idea.

En una entrevista en Rac1, apenas doce horas después de su investidura, Rull ha detallado que la cúpula del partido le eligió porque su "nombre puede generar consenso" con los partidos independentistas que terminaron apoyando su investidura, Esquerra Republicana y la CUP.

El que ya es la segunda autoridad catalana, ha asegurado que su respuesta fue un 'sí' rotundo desde el primer momento y que ha sido un honor para él asumir esta responsabilidad: "Es una institución que quiero con absoluta pasión". Sin embargo, también ha dicho que, ya por la noche, veía complicado ser finalmente investido porque no "salían los números" para lograr los apoyos necesarios.

No participó en la negociación

Rull ha explicado que no fue hasta el lunes por la mañana cuando supo a ciencia cierta que sería finalmente el candidato del partido: "Junts te propondrá pase lo que pase", estamos buscando el consenso con los demás partidos", le dijo Puigdemont. A mediodía preparó el discurso que pensaba pronunciar de ser elegido, aunque terminó improvisando una buena parte.

Sobre las negociaciones, ha dicho que él no participó, fueron Carles Puigdemont y Jordi Turull, por parte desde Junts, y Marta Rovira, por parte de ERC. Sin embargo, ha asegurado no saber el nombre del interlocutor de la CUP.

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"Aún estoy levitando un poco", ha dicho sobre lo mucho que le ha cambiado la vida en 24 horas. A modo de anécdota, ha explicado que el lunes llegó al Parlament en el Volkswagen de su mujer, el cual sigue allí aparcado porque, a su salida le dijeron que "no podía salir con el Polo, debía ir con el coche oficial".

De preso a president

Fue "el hecho de que un preso político sea president del Parlament" lo que decantó al partido por su nombre, ha asegurado. Considera que, puesto que "cuando se aplicó el 155 yo era diputado y conseller", su nombramiento tiene un gran simbolismo.

Además, ha sido elegido president el día antes de que entrara en vigor la Ley de Amnistía, a la cual se va a acoger "pese a tener las penas extinguidas, para borrar los antecedentes penales" que, ha informado, le impiden viajar a "algunos países" por la gravedad de los delitos por los que fue condenado. Su abogado, Jordi Pina, "ya lo tiene todo preparado para presentar los escritos", ha asegurado.

Ronda de contactos para la formación de Govern

Sobre la futura investidura del president de la Generalitat, Rull tendrá ahora la responsabilidad de plantear un nombre. Desde el partido, ha dicho, "la prioridad es que Puigdemont sea president" y Junts no plantea otros nombres.

Sin embargo, acatará las obligaciones del cargo institucional e iniciará, "la semana que viene" una ronda de contactos con todos los partidos, de mayor a menor representación, la cual "tiene que servir para constata la voluntad de presentar candidatura y los apoyos que tiene cada una" antes de proponer una votación al Parlament.

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