El PSC ganaría las elecciones autonómicas del 12 de mayo. El candidato de los socialistas catalanes Salvador Illa obtendría un resultado 10 puntos por encima del de Junts y ERC, que quedarían prácticamente empatados en la segunda posición.
Según el sondeo del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) --el último antes de los comicios--, el PSC obtendría una horquilla de entre el 29,8 y el 33,2% de los votos. Los neoconvergentes alcanzarían entre el 15,4 y el 18,1%, por delante de los republicanos (15,2 y el 17,9%).
Así pues, la encuesta dirigida por Félix Tezanos evidencia que el amago de dimisión del presidente del Gobierno Pedro Sánchez ha tenido efectos en el tablero político catalán. Por un lado, ha conseguido impulsar a su antiguo ministro de Sanidad y, por otro, que los partidos independentistas pierdan fuelle. Especialmente, el candidato de Junts Carles Puigdemont, que arrancó la campaña siendo el principal protagonista y que acabó siendo opacado por la carta del mandatario español.
Según estos datos, ERC y Junts no conseguirían la fuerza necesaria para gobernar juntos la Generalitat. Es decir, que no alcanzan los 68 escaños que se requieren para la mayoría absoluta.
El PP supera a Vox: cuarta fuerza
Por su parte, el PP volvería a ser la cuarta fuerza en el Parlament, con una estimación de entre el 9,6% y el 11,9%. Cabe recordar que perdió esa condición en 2015, cuando Xavier García Albiol obtuvo 11 sillas. Desde entonces, la posición del partido ha decaído hasta quedarse en el Grupo Mixto, pero los pactos de Sánchez con los nacionalistas y la debacle de Ciudadanos le han dado oxígeno.
Los de Alejandro Fernández superarían a Vox, que se quedaría entre el 5,8% y el 7,5%. Por detrás, los de Jéssica Albiach recogen entre el 5 y el 6,7%, lo que también demuestra que Comuns-Sumar pierde votos hacia la izquierda. Ello explica el discurso de confrontación que ha venido ejerciendo su líder hacia el PSC, consciente de que pueden morder parte de su electorado.
La CUP pierde influencia
La CUP de Laia Estrada también sufriría una debacle, según el mismo sondeo. Conseguiría entre un 3,2% y un 4,6%, lo que dejaría a los antisistema en una situación muy débil. Atrás quedan los tiempos en que sus diputados decidían el rumbo de la política catalana por sus exigencias a una ERC y Junts que necesitaban sus votos para investir a un president de la Generalitat.
Sin ir más lejos, cabe recordar que el republicano Pere Aragonès llegó a la presidencia gracias a sus votos.
Aliança Catalana entra al Parlament
Por otro lado, el CIS pronostica que la Aliança Catalana de la ultra Sílvia Orriols tendría representación en la Cámara autonómica. Lograría entre un 3% y un 4,4%, superando así la barrera para obtener escaño.
Menos suerte tendrían Alhora de Clara Ponsatí y Ciudadanos, que se quedarían en el 0,6-1,3% y 0,5-1%, respectivamente.