Mossos d’Esquadra blindará las carpas informativas durante la campaña de la ultra Sílvia Orriols

La medianoche del viernes 26 de abril, las calles de todas las ciudades de Cataluña se llenarán con la imagen de los políticos que encabezarán las listas electorales de los próximos comicios autonómicos del 12 de mayo. Con el pistoletazo de salida a la campaña, todas las formaciones iniciarán una carrera a fondo para atraer al mayor número de votantes: los meetings, debates, el merchandising y, por supuesto, los puntos informativos en pequeños, medianos y grandes municipios acapararán el protagonismo durante los 15 días previos a las elecciones.

Todos estos encuentros aparecerán reflejados en las agendas de las distintas comisarías de los Mossos d'Esquadra, cuyos máximos responsables deberán decidir, en cada caso, qué actividades requieren de una mayor o menor presencia de agentes del cuerpo. Sin embargo, según las fuentes policiales consultadas existen dos formaciones que contarán con más seguridad: Vox y Aliança Catalana. Este último es el partido de extrema derecha independentista pilotado por la ultra Sílvia Orriols, la alcaldesa de Ripoll (Girona). 

"Especial atención"

Según las fuentes policiales consultadas, no es ninguna novedad. "Los Mossos d'Esquadra y las Policías Locales siempre cubrimos los actos políticos y de campaña, especialmente, de aquellos partidos que puedan suscitar más conflicto", aseguran. Aliança Catalana uno de ellos. No obstante, matizan: "No nos preocupan los políticos, más bien acudimos para que ciudadanos con ideologías contrarias no protagonicen ningún altercado". 

Así, los Mossos han confirmado que prestarán "especial atención" a los puntos informativos y eventos que organice Aliança Catalana durante los 15 días que dure la campaña electoral. Por ello, las distintas regiones policiales ya están montando un calendario de previsiones para tener claro "dónde, cuándo y en qué formato" se celebrarán estos actos en todo el territorio catalán. 

Evitar boicots y garantizar el orden público

"La idea -aseguran- no es montar un dispositivo especial para los actos protagonizados por VOX o Aliança Catalana", pero sí que se destinarán más recursos (especialmente, con agentes de seguridad ciudadana uniformados) para los eventos y actividades que lleven las siglas de estos dos partidos.

El objetivo, insisten, es "evitar que se boicoteen dichos actos y poder garantizar, por un lado, el derecho de los políticos a realizar la actividad de campaña que estén llevando a cabo, pero también la seguridad y el orden público". No se descarta, por lo tanto, que puedan participar, incluso, agentes de orden público (o antidisturbios) de las unidades BRIMO y ARRO de los Mossos d'Esquadra. "Estudiamos cada caso y valoramos qué recursos pueden ser necesarios. A veces no hace falta que los agentes estén presentes en el acto, pero sí prevenidos", añaden. 

Ataques durante la recogida de avales

De este modo, se pretende evitar que se repitan altercados como los que sucedieron el pasado martes 26 de marzo durante la recogida de avales de Aliança Catalana en Sant Sadurní d'Anoia y Arenys de Mar, antes de formalizar su candidatura a las próximas elecciones autonómicas. Durante el acto, donde la formación de extrema derecha pretendía recoger los avales necesarios para poder presentarse a los comicios, un grupo de jóvenes atacó la carpa informativa del partido de Sílvia Orriols. 

Según publicó la formación liderada por la alcaldesa de Ripoll en sus perfiles sociales, "unos jóvenes de extrema izquierda" agredieron a varios militantes y les robaron las hojas con avales. 

Esa misma jornada también fue tensa en la ciudad de Granollers (Barcelona), donde otro grupo de jóvenes increpó a lo militantes de Aliança Catalana hasta el punto que tuvieron que intervenir los agentes de los Mossos para poder garantizar que la carpa informativa pudiese seguir pidiendo avales. La propia Sílvia Orriols se hacía eco de estos altercados en su perfil de X (la antigua Twitter): 

Incidentes en Ripoll en 2021 con Vox 

Paradójicamente, uno de los momentos de mayor tensión que se vivió durante la campaña electoral de 2021 fue precisamente en Ripoll, cuando algunos vecinos del municipio increparon a los militantes de Vox. De hecho, los Mossos tuvieron que custodiar a la comitiva del partido de Santiago Abascal ante la decena de personas que con carteles, cláxons y gritos de "fuera fascistas de nuestros pueblos" se encararon a Ignacio Garriga y Rocío Monasterio. 

En este caso, incluso, tuvieron que intervenir agentes antidisturbios para frenar el avance de un grupo de supuestos antifascistas que persiguieron a los militantes mientras paseaban por las calles del pueblo, tras el acto político.