ERC ha convertido la reforma del modelo de financiación en un arma electoral contra el PSC. En una conferencia impartida en el Colegio de Economistas de Cataluña, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha retado a Salvador Illa a desmarcarse de la propuesta de "financiación singular" planteada por el Govern.
"Emplazo al PSC a que diga por qué no podemos administrar nuestros recursos como hace el País Vasco o Navarra. ¿Por qué prefieren el café para todos?", se ha preguntado ante un auditorio lleno de bote en bote. A su vez, ha criticado a los barones populares y socialistas que han salido en tromba contra el planteamiento del Ejecutivo autonómico.
Cupo a la catalana
El president ha repetido las líneas maestras de la propuesta presentada la semana pasada por la consejera Natàlia Mas en un discurso no exento de triunfalismo sobre los logros económicos de Cataluña.
Según ha explicado Aragonès, el modelo de financiación planteado por los republicanos permitiría a Cataluña recaudar todos los impuestos generados en el territorio --"no pedimos nada que no sea nuestro, que no haya producido nuestro país"--.
A continuación, la Generalitat aportaría a la caja común un fondo de equilibrio territorial, pensado para contribuir a la solidaridad interregional, y una contraprestación económica a cambio de los servicios de la Administración General del Estado en la comunidad. Aunque el presidente no ha detallado el importe de ninguna de estas partidas.
Negociación bilateral
Este esquema calcado al del cupo vasco y navarro difiere del defendido por las principales entidades económicas de la sociedad civil catalana, que no incluye expresamente la recaudación del 100% de los tributos por parte de la Hacienda autonómica.
Aragonès ha subrayado que este modelo se debería pactar en una negociación bilateral con el Estado. Por tanto, al margen del régimen común en el que ahora mismo se encuadra Cataluña.
Preguntado por las diferencias con la propuesta que ya realizó el Govern en 2012 --cuando el presidente era Artur Mas--, ha respondido que el contexto actual es "muy diferente". Ha defendido que Cataluña tiene "la fuerza para que las propuestas que tienen un amplio consenso se puedan materializar" y ha puesto en valor la negociación con el Gobierno de Pedro Sánchez.