Un concejal de Junts ha insinuado que el Ayuntamiento de Cabacés (Tarragona), en manos de ERC, es corrupto por impedir el cambio de nombre del municipio que él proponía. Lo ha dicho sin tapujos, en X, en reacción a una publicación que hace referencia a los acuerdos votados en el último pleno celebrado en el consistorio este 18 de marzo.
Carles Prats, concejal de Junts en Cabacés, ha escrito que "no querer cumplir la ley es una forma de corrupción". Y lo ha dicho en referencia a la negativa de los seis concejales republicanos del pueblo, que gobiernan con mayoría absoluta, de catalanizar la nomenclatura de esta pequeña localidad del Priorat.
Con doble s y r
Cabacés es uno de los nueve municipios catalanes que se escriben al margen de la normativa y, aunque el Nomenclàtor oficial de toponímia major de Catalunya contiene tanto la forma oficial como la normativa, en "usos no oficiales se recomienda utilizar siempre la forma normativa desde el punto de vista lingüístico", recuerda el Optimot, el servicio de consultas lingüísticas de la Generalitat.
En este escenario, Cabacés es la forma oficial del pueblo, pero la forma normativa es Cabassers, pues proviene del árabe Avicabescer y, en catalán, los nombres que parten de esa lengua se adaptan con la grafía -ss-; asimismo, se mantiene la -r que ya figura en la documentación antigua, tal y como consta en el Optimot.
Una consulta popular
En este sentido, desde hace unos años se insta al consistorio para que catalanice el nombre y lo adecue a la normativa, pues Cabacés es la versión castellana, impuesta tras la Guerra Civil. Sin embargo, y aunque el alcalde, Jaume Pujals, está de acuerdo, sostiene que como ayuntamiento no se sienten legitimados y, en todo caso, habría que realizar una consulta popular.
De hecho, el pleno del pasado lunes responde a la petición de Prats de tratar este asunto.