El juzgado penal número 1 de Tarragona ha condenado a tres radicales secesionistas a un año de cárcel por los altercados ocurridos en la plaza Imperial Tarraco de la ciudad a raíz de una protesta el 15 de octubre de 2019 contra la sentencia que condenó a los mandatarios del procés de Cataluña.
Además de ser condenados a prisión por un delito de atentado a agente de la autoridad, el juzgado también les multa por un delito leve de lesiones. La sentencia absuelve a un cuarto joven que fue imputado por los mismos cargos.
Lesión a un 'mosso'
En la sentencia, el juez considera probado, a partir de las pruebas testificales y periciales practicadas durante el juicio, que sobre las ocho y media de la tarde uno de los condenados se abalanzó sobre un agente de los Mossos d'Esquadra y le propinó un empujón que logró desestabilizarlo, lo que le causó una lesión en un dedo de la mano.
Según el relato del ministerio fiscal, que avala el juez en su sentencia, el joven actuó con el "ánimo de menoscabar la integridad física y el principio de autoridad que representan" los agentes policiales.
Agresión a otros dos agentes
El juez también ve probado que sobre las doce y media de la noche, una vez acabada la manifestación, otros dos agentes de los Mossos fueron agredidos por los otros dos condenados mientras perseguían a un grupo de personas no identificadas que lanzaban piedras contra la policía.
Uno de estos agentes, según la sentencia, sufrió una lesión en la muñeca y el hombro izquierdo que precisó de dos días de curación.
Los agentes agredidos estaban ese día protegiendo el edificio de la subdelegación del Gobierno en Tarragona, en cuyas inmediaciones se produjeron "alborotos" y lanzamiento de "objetos contundentes" como "piedras o cristales".
El juez no ve acreditado que el cuarto acusado lanzara una piedra contra otro agente de los Mossos, motivo por el que lo absuelve.
Penas
A los tres condenados les impone una pena de un año de prisión, mientras que a uno de ellos también le acuerda una multa de 225 euros y una indemnización de 77,74 euros a un agente de los Mossos.
Además, otro de ellos tiene que pagar una multa de 300 euros y deberá indemnizar a un agente con 272,09 euros, mientras que al tercer condenado no se le aplica ninguna multa ni ninguna indemnización.