Al menos 18.825 personas se encuentran en listas de espera en Cataluña para acceder a alguna plaza en servicios o recursos del ámbito social.

Así lo denuncia un informe de la Taula del Tercer Sector Social. Bajo el título "Esperando mis derechos. Radiografía de los tiempos de espera en los recursos y prestaciones más solicitados en Cataluña", elaborado junto a la periodista Natàlia Vila, donde se desvelan diversas cifras que dan la medida de este tipo de carencias y desatención en la autonomía.

Según sus datos, se parte de la base de que en Cataluña existen 240.102 prestaciones que llegan a 198.202 personas: 38.934 prestaciones de atención residencial; 13.400 prestaciones en centros de día; 33.825 prestaciones de servicios de ayuda a domicilio; 26.029 prestaciones de teleasistencia; 23.565 prestaciones económicas vinculadas a servicios; 104.074 prestaciones económicas a cuidadores familiares y otras 275 prestaciones.

Problemas para miles de mayores y discapacitados

El documento revela que 10.938 personas mayores están en listas de espera para conseguir una plaza de residencial y 3.078 para acceder a un centro de día, mientras que "la Administración no determina qué tiempos de espera hay entre que se presenta la solicitud hasta la adjudicación de la plaza".

Respecto a las personas con discapacidad, hay 4.373 con discapacidad intelectual que están esperando plaza para acceder a algún recurso de vivienda y centro diurno y 396 en el caso de las personas con discapacidad física.

Las listas de espera para mujeres que han sufrido violencia machista oscilan en función de varios factores -detección, valoración de riesgo, atención previa en los municipios, red de la que se dispone, entre otros- y entre 20 y 30 personas -y sus hijos e hijas- están a la espera de poder ingresar en un Servicio de Acogida y Recuperación (SAR), y entre unas 5 y 10 lo están a la espera de ingresar en un Servicio Sustitutorio del Hogar (SSLL).

Propuestas

Desde la Taula proponen más transparencia, un mayor cruce de datos entre departamentos para que el sistema funcione mejor y agilizar las conversaciones y negociaciones para reformar la Cartera de Servicios Sociales.

También piden una mejor planificación y abordaje ante el envejecimiento de la población y el incremento de las situaciones de dependencia, hacer frente al trasvase de personas entre servicios, poner cifras reales a problemáticas como el sinhogarismo y modificar la Ley de extranjería, entre otros.

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