El número de hogares catalanes que no pueden hacer frente a los gastos más básicos alcanzó su máximo histórico en 2022. Cerca de un 18% --un tercio de las familias en Cataluña-- afirman haber sufrido privación de bienes materiales, un porcentaje muy superior a los niveles prepandemia, que se situaba entorno al 12%. Un aumento que se ha producido a pesar del esfuerzo fiscal desplegado por parte del sector público desde el inicio de la crisis sanitaria.
Son datos recopilados por la Cambra de Comerç de Barcelona en su último informe Indicadors de Progrés i Benestar - IPB Cambra, que atribuye este aumento, entre otras cosas, al "preocupante" incremento de los hogares que no pueden permitirse mantener una temperatura confortable en su vivienda --dos de cada cinco familias-- por culpa de los precios energéticos.
Deberes pendientes con la energía renovable
En relación a la pobreza energética, el informe también subraya que Cataluña no está haciendo los deberes en materia de energías renovables. El documento remarca que el porcentaje de energía en la comunidad no ha experimentado un avance significativo en los últimos años y que se encuentra estancado. De hecho, en 2022, Cataluña solo disponía del 5,2% de stock de energía renovable en todo el país.
En este sentido, la Cambra considera que este retraso dificulta la soberanía energética y sitúa a Cataluña en una "posición de vulnerabilidad" frente a la "fuerte volatilidad" de los precios energéticos. Algo que expone a los colectivos más desfavorecidos a nuevos episodios de pobreza energética.
El salario medio, estancado desde 2004
Aunque en términos absolutos el salario medio real por hora trabajado en Cataluña ha aumentado de forma destacable, el análisis a largo plazo muestra que el salario medio en 2022 se encuentra estancado desde el año 2004. En cambio, la productividad por hora sí que ha seguido una tendencia ascendente a partir de 2008.
Esta tendencia entre la evolución de los salarios y la productividad preocupa a la corporación, que considera que esta divergencia podría suponer un riesgo para la sostenibilidad del modelo económico y social de la comunidad.
Progreso económico, social y ambiental "insuficiente"
Con todo, la Cambra ha alertado que Cataluña ha sido incapaz de converger en las últimas dos décadas con los cinco países fundadores de la Unión Europea en progreso económico, social y ambiental. Aunque el progreso económico en el territorio siempre ha seguido una tendencia creciente, todos estos factores ponen en riesgo el avance sistemático del bienestar de la ciudadanía.
La presentación del estudio ha ido a cargo de la presidenta de la Cambra, Mònica Roca i Aparici, y del director de Estudios del organismo, Joan Ramon Rovira. En esta edición, se ha hecho un balance de la evolución del nivel de vida durante el periodo 2000-2022, teniendo en cuenta la crisis financiera de 2008, la pandemia y la crisis energética actual.