La última obsesión de los antisistema: las charlas de Mossos d’Esquadra en las escuelas

A los anarcosindicalistas no solo les molesta el amplio “repertorio de temáticas” que abordan los uniformados, sino que denuncian que la perspectiva con la que acercan estos asuntos a los estudiantes es “sesgada, anticuada y tendenciosa”. Según ellos, lo hacen desde el punto de vista “punitivo y no educativo”, desde un planteamiento “paternalista y retrógrado” y con “el objetivo de infundir miedo y no de educar”.

Acusan a los Mossos de “intrusismo”

El sindicato antisistema acusa en un comunicado a los cuerpos policiales de “intrusismo” por impartir charlas que, según su parecer, podrían dar asociaciones y entidades formadas por especialistas y expertos, pues consideran que su expertise en estos campos es insuficiente y que carecen, en temas como la violencia machista, de perspectiva de género. “La imagen de un mosso, generalmente hombre y con la pistola en el cinturón hablando de patriarcado a una clase de adolescentes es aberrante”, suscriben.

En el mismo comunicado, CGT también carga las tintas contra la Consejería de Interior, a quien acusa de usar estas charlas para intentar blanquear la imagen de Mossos d’Esquadra con la complicidad del Departamento de Educación. Preguntados por estas afirmaciones, los responsables de la Federación de Enseñanza de CGT Cataluña han remitido a este medio al documento publicado y han expresado que no se pronunciarán hasta que la filiación, a la que han pedido que responda una encuesta, se posicione.

UGT defiende las charlas de los policías

Jesús Martín, profesor de instituto y responsable de FP de la Federación de UGT en Cataluña, asegura que la postura de su federación es bien distinta a la de los anarcosindicalistas. “Somos un sindicato de clase en el que la policía también está integrada, como miembro de la federación de servicios públicos”. Pero, más allá de esto, Martín sostiene que la presencia de uniformados en los centros, lejos de tener una función represiva, tiene un papel “pedagógico y didáctico”.

Argumenta que el trabajo que hacen los cuerpos de seguridad del Estado para conciencia sobre problemáticas sociales a los más jóvenes, con contenidos adaptados, es positivo y que ayuda a que los más pequeños puedan identificar a quién deben recurrir cuando tengan un problema. “En los países de nuestro entorno no hay este estigma de que la policía es un cuerpo represor, una visión que no compartimos en absoluto”, reitera Martín. Añade, además, que si las charlas tienen un enfoque policial es, precisamente, porque la policía una parte implicada no solo en la resolución sino también en la prevención de estos fenómenos.

Desestigmatizar la presencia de la policía en las escuelas

En la misma línea que Martín, Xavier Massó, secretario general del sindicato Professors de Secundària de Cataluña, define la postura de CGT como “grotesca” y acusa a los antisistema de recurrir a la épica que envuelve el mensaje “fuera la policía de la escuela”. El docente lamenta que se pretenda convertir la presencia de los agentes en los centros en un tabú, como según su parecer, ya se ha hecho con el término “disciplina”, en pro de la palabra “convivencia”. 

Todos estos estigmas, añade, no hacen más que empeorar las cifras de violencia e incivismo en las escuelas. “Muchos institutos son una olla a presión, con alumnos que presentan problemas conductuales claros por culpa de normativas permisivas y garantistas”. Asimismo, añade que los anarcosindicalistas parecen no conocer la realidad de los colegios si se niegan a recordar al alumnado que habrá “sanciones” para quienes se comporten de forma inadecuada. “Veo bien que la policía haga charlas en los centros, igual que veo bien que en el momento en el que se produzca un incidente con violencia en el entorno escolar se ponga en sus manos”, denuncia. En cualquier caso, añade, “si estamos hablando de delincuencia la policía tendrá algo que decir”.

USTEC sostiene que “no deben entrar en los colegios”

En el extremo contrario Iolanda Segura, maestra y portavoz del sindicato mayoritario de profesores USTEC, suscribe lo expuesto en el comunicado de CGT sobre la salida de los cuerpos policiales de los colegios. “Las charlas que imparten no son pedagógicas ni aptas”, asegura la portavoz, que pide que sean los propios centros u otros profesionales quienes conciencien al alumnado sobre estas temáticas. “No tienen las aptitudes necesarias para desarrollar estas tareas”. 

Preguntada sobre el hecho de que sean los Mossos d’Esquadra quienes impartan charlas sobre agresiones sexuales en institutos, dado que el cuerpo policial autonómico ha transformado su Unidad Central de Agresiones Sexuales (UCAS) en un Área Central de Violencias Sexuales, doblando el número de efectivos y colocando a dos mujeres al frente, la inspectora Ester Salcedo y la sargenta Maria Kira Estrada, Segura se cierra en banda. “Se tendría que valorar muy bien desde la Consejería de Educación, pero podemos caer en el peligro de que se haga desde una óptica policial y no de prevención”, sostiene. “Por muy buena que sea esta unidad, ¿por qué deben ser ellos los que vengan personalmente? No, los cuerpos policiales no deben entrar para nada ni en los colegios ni en los institutos”, zanja. 

Un cuerpo feminizado y volcado en la lucha contra las agresiones sexuales

Desde el Departamento de Interior recuerdan que en un modelo policial de proximidad, más cercano a la ciudadanía, el hecho de que los Mossos d’Esquadra, como servidores públicos, estén presentes en las escuelas es “fundamental”. “Es evidente que el impacto es claramente positivo, pues así nos lo han hecho saber los propios alumnos, pero sobre todo los padres y profesores”, sostienen las voces consultadas.

Sobre la afirmación que hace el sindicato CGT, que tacha de “aberrante” el hecho de que sean policías hombres los que hablen sobre el patriarcado, desde la consejería recuerdan que se está haciendo un gran esfuerzo por feminizar el cuerpo. “Estamos en el 23% de mujeres en el cuerpo, sin tener en cuenta los últimos 800 agentes que han entrado en esta última promoción, así que el porcentaje será mayor”, expresan, frente al 19% de agentes mujeres de hace dos años. “El esfuerzo para feminizar el cuerpo es innegable. ¿Hay policías hombres en las charlas? Sí. ¿Hay cada vez más mujeres? También.” reiteran.   

Sobre los contenidos que imparten, desde Interior aseguran que están adaptados a niños o jóvenes, pues si se pretende que el cuerpo policial autonómico se acerque a la sociedad, no se puede obviar que estos también forman parte de la misma. “La mejor forma de evitar que tengan ciertos prejuicios hacia la policía es que entren en contacto con los agentes, acercando la policía a los más jóvenes”.