La visita de la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Yolanda Díaz, al expresidente de la Generalitat fugado por el procés, Carles Puigdemont, y a su exconseller Toni Comín en Bélgica para intentar obtener el apoyo de su partido, Junts per Catalunya (JxCat) a la investidura de Pedro Sánchez (PSOE) como presidente del Ejecutivo ha causado indignación en el constitucionalismo catalán. Entidades y partidos -salvo el PSC- han expresado su malestar por el sorprendente viaje de la líder de Sumar a la Eurocámara para negociar con un prófugo de la justicia española, más teniendo en cuenta que entre las exigencias de éste figuran la amnistía a los condenados y encausados por el golpe secesionista al Estado de 2017 y la celebración de un referéndum para separar a Cataluña del resto de España.
"Una puñalada trapera"
"Indigno. Denigrante. Humillante. Una puñalada trapera a todos los españoles comprometidos con la justicia, la igualdad y la libertad. Una ofensa a los ciudadanos de Cataluña que dan la cara para defender nuestro Estado de derecho de las embestidas del nacionalismo excluyente", resume por ejemplo Societat Civil Catalana (SCC) en un mensaje en la red social X.
"Erosiona las instituciones"
Desde Ciutadans (Cs), su diputado en el Parlament Carlos Carrizosa ha apuntado que la reunión de Díaz con Puigdemont (Junts) "erosiona" las instituciones, definiendo a este último como "el autor del más grave ataque a la democracia española en las últimas décadas".
Para Carrizosa, el encuentro también erosiona "la credibilidad internacional y al valiente constitucionalismo catalán".
"Infamia", "falta de escrúpulos" y "apego al sillón"
En el PP de Cataluña, su secretario general, Santiago Rodríguez, considera que la visita de la líder de Sumar al exmandatario convergente "debe ser debido a la falta de escrúpulos o al apego al sillón... o aún peor, ¡a ambos!".
En la misma línea, el diputado popular Daniel Serrano considera que se trata del "primer capítulo de una infamia para la historia".
Por su parte, el también diputado en el Parlament Nacho Martín Blanco ha recordado además que Yolanda Díaz se negó a reunirse con el ganador de las pasadas elecciones generales, Alberto Núñez Feijóo (PP), pero no ha dudado en hacerlo ahora "con un fugado de la justicia". Algo que considera "un desprecio intolerable al Tribunal Supremo y a nuestro sistema judicial y un insulto a todos los españoles".
El PSC tira balones fuera
En cambio, desde el PSC, su portavoz Èlia Tortolero ha comentado que la reunión de este lunes en Bruselas entre Díaz y Puigdemont (Junts) es "una iniciativa de Sumar y no compromete para nada al PSC ni a los socialistas".
En rueda de prensa, la dirigente socialista ha apelado a la discreción de las negociaciones. Al ser preguntada sobre si los socialistas no descartan reunirse con Puigdemont, ha insistido que "hay que ser muy discretos con las negociaciones".
Tortolero, asimismo, ha sostenido que el PSC respeta que cada partido establezca sus interlocutores en la negociación al ser preguntada sobre si consideran a Puigdemont un interlocutor válido para negociar.
La dirigente del PSC tampoco ha aclarado si considera que la amnistía que exigen los autores del golpe secesionista al Estado de 2017 está dentro de la Constitución, y ha tirado balones fuera comentando que son "los juristas" quienes tienen que opinar al respecto.
Sobre la propuesta del lehendakari vasco, Iñigo Urkullu (PNV), de celebrar una convención para reinterpretar el modelo territorial dictado por la Constitución al gusto de los nacionalistas, la portavoz de los socialistas catalanes ha dicho que respeta "las propuestas constructivas, sin entrar al detalle, que estén en el marco constitucional".