El PSOE y ERC ultiman la modificación del reglamento del Congreso de los Diputados para permitir que el catalán, el euskera y el gallego en cualquier debate parlamentario y en las comisiones de la Cámara Baja.
El uso de las lenguas cooficiales en el Congreso fue el compromiso principal que el independentismo catalán, también Junts, arrancó a los socialistas para facilitar la elección de la expresidenta Balear, Francina Armengol, como presidenta de la Cámara el pasado 17 de agosto. La constitución de la Mesa fue el primer gran pacto alcanzado entre las fuerzas de izquierda, PSOE y Sumar, y los nacionalismos del país en la nueva legislatura. Allanó el camino a la investidura de Pedro Sánchez, aunque todos los implicados han desvinculado ambas votaciones y se han instado a proseguir con la negociación.
Un compromiso de Armengol
La presidenta del hemiciclo se comprometió entoncces de forma personal en sacar adelante la reforma para permitir el uso de todas las lenguas oficiales del Estado con total normalidad en los debates que se mantienen. Reconoció que el cambio no sería inmediato, pero prometió que el pacto no se quedaría en un cajón.
El artículo 70.2 del reglamento de la Cámara establece que los discursos deben ser pronunciados "de forma prersonal y de viva voz", y que el orador puede hacer uso de la palabra desde la tribuna o desde su escaño. Sin embargo, no se especifica si los actos administrativos o el registro de proposiciones o leyes también pueden realizarse en estas lenguas cooficiales junto al castellano.
Una reivindicación histórica de los grupos nacionalistas
El uso del catalán, el vasco y el gallego ha sido rechazado hasta la fecha como lenguas del Congreso. Es una de las reivindicaciones más antiguas de los grupos nacionalistas y, según lo filtrado desde las filas republicanas, ya se trabaja para realizar los cambios reglamentarios necesarios para que pueda ser una realidad.
El primer paso en este sentido es presentar una propuesta de ley. Armengol contempla convocar un pleno extraordinario con el único objetivo de aprobar la nueva normativa. Los grupos implicados negocian ya los últimos flecos de esta propuesta legislativa, la primera gran negociación del nuevo curso político en España.