Doble descarga eléctrica al Govern por parte de los principales sindicatos policiales de Cataluña. El Departamento de Interior, que pilota Joan Ignasi Elena (ERC), está viviendo un verano horribilis por la ruptura con dos de los principales sindicatos policiales: Fepol, de Mossos d'Esquadra, y SPL-CME, que representa a las cerca de 300 policías locales en la autonomía.
Lo explican fuentes policiales recordando la semana negra que vivió el equipo del conseller Elena, y que no tiene visos de mejorar, por ahora. Interior vio cómo hasta ahora una plataforma sindical aliada y un auténtico conglomerado y lobi de seguridad, Fepol, adscrita a la UGT, tildaba de "traición" un acuerdo parcial de mejoras pactado hace unos días con los sindicatos rivales Uspac, Cat, SPC, Segcat y SEI.
"Viene de lejos: están dolidos con Elena"
El asunto no es meramente sindical. Lo destacan las fuentes consultadas, que subrayan que "Elena y Fepol han roto". Señalan que la agrupación "desconfía de un conseller incapaz de tomar decisiones complejas si no las consulta antes con la calle Calàbria --donde radica la sede de ERC--". Lo confirma otra fuente de la oposición parlamentaria, Elena, más que regir como consejero, "evita cometer errores, por lo que depende más que nunca del partido".
Sea como fuere, Fepol, que algunos consideraban benevolente con Interior hasta ahora, "se ha distanciado" de la cúpula política del departamento y habría entrado en franca guerra con él. Y sin visos de mejora.
Tiene minoría en el Consejo de Policía
La prognosis del duelo Elena-Fepol es negativa porque la plataforma ha perdido la mayoría dentro del Consejo de Policía, y los cinco sindicatos alternativos la han sustanciado. El pacto de condiciones parciales presentado hace unos días es el primer acuerdo en este sentido, pero habrá más.
Preguntados por la cuestión, desde Uspac rechazaron hacer sangre de la brecha descrita, pero se felicitaron por un acuerdo con la consejería que tendrá continuidad. Desde esta combativa agrupación que comanda el bregado sindicalista Albert Palacio se destaca el "sistema de compensación" a los agentes que incurren en más riesgos por su trabajo. Se prepara otra mejora salarial, esta vez dedicada a los festivos especiales --como Navidad-- en los que los policías tengan que trabajar. Ello, no obstante, se negociará y aprobará a partir de septiembre.
Las policías locales, contra el nombramiento de Marc Costa
Ese ha sido el primer incendio de la consejería de Elena. Pero es que ha habido otro. El Sindicat de Policies Locals (SPL-CME) cargó la semana pasada contra el departamento por el nombramiento del independentista irredento Marc Costa, antiguo jefe político de los Agentes Rurales, como nuevo director general de Policías Locales.
SPL-CME afeó una designación "en pleno agosto --el día 1-- y sin negociar con los sindicatos". En conversación con este medio, Daniel Bel, secretario general, ha confirmado su "decepción" por "la falta de negociación" con la parte social y la imposición en pleno verano, "con menos capacidad de reacción", de un nuevo director general del ramo. Ante ello, Bel prescribió más diálogo con la plataforma, que es mayoritaria entre los cuerpos locales de seguridad. "Estamos dolidos, más que por el fondo, por las formas" del Departamento de Interior, ha apostillado.
Cartera 'caliente'
Lo que subyace es la gestión de una consejería muy compleja sobre la que ERC ejerce una tutela directa para evitar quemar a su consejero. Y con algunos resultados erráticos, como la destitución del comisario jefe Josep Maria Estela en 2022 tras apenas un año en el cargo.
Pero es que antes, el cuerpo tocó fondo con el cese fulminante del responsable de Investigación Criminal, Toni Rodríguez, al que se castigó enviándolo a una comisaría de Rubí (Barcelona). Pasó en diciembre de 2021 y levantó una tormenta política, pues esta área había investigado casos de corrupción que afectaban a la antigua CDC, ahora Junts.