La República Dominicana ha destituido a su cónsul en Barcelona, César Méndez, después de que fuera denunciado por, presuntamente, tener un accidente de coche y negarse a someterse a un control de alcoholemia en L'Hospitalet de Llobregat.
En un comunicado público, el Ministerio de Relaciones Exteriores (Mirex) ha informado que ha "procedido a hacer la suspensión del diplomático". Ello tiene lugar ante "los hechos por los que está siendo investigado por las autoridades españolas".
Nuevo cónsul
A renglón seguido, el mismo ministerio informa del nombramiento de Antonio Gómez como nuevo legado en la Ciudad Condal. La decisión se enmarca en "en cumplimiento de los procesos de alternancia".
De hecho, Dominicana recuerda que Gómez "se encontraba en proceso de transición para la entrega de la misión", por lo que su salida no sería tan inesperada.
Exteriores había pedido su cese
Sea como fuere, el Ministerio español de Exteriores había pedido discretamente su destitución, como explicó este medio.
Aunque la potestad era de Dominicana, el departamento de José Manuel Albares argumentó con elegancia que procedía su cese por la mala imagen que había dado Méndez del país.
Denunciado
Lo pidió Exteriores después de que el cónsul fuera denunciado por la Guardia Urbana de L'Hospitalet de Llobregat por tomar parte en un leve accidente de coche y negarse a someterse a la prueba de alcoholemia, avanzó El Caso.
El ahora cesado aseguró que no conducía bajo los efectos del alcohol y se negó a hacer la prueba porque, en su opinión, era voluntaria habida cuenta de su condición de diplomático en España.