Una borrachera del cónsul de República Dominicana en Barcelona ha abierto una pequeña crisis diplomática entre la isla caribeña y el Reino de España. El Ministerio de Exteriores ha exigido discretamente la destitución de César Méndez después de que este fuera denunciado por haberse negado a someterse a una prueba de alcoholemia durante un accidente de tráfico.
Lo explican fuentes de Exteriores, que han indicado que han sugerido al Gobierno de Domincana "el relevo" de Méndez tras la colisión, avanzada por El Caso, por "mancillar la imagen del país y de la comunidad de este país en España". El mensaje ha sido dirigido por los canales extraoficiales --no se ha emitido queja oficial-- para evitar envenenar las relaciones entre los dos estados, agregan las mismas voces.
"Le quedan dos años en el cargo"
Las mismas fuentes diplomáticas han recordado que el cónsul de Dominicana en Barcelona --de carrera, no honorario-- "fue nombrado en 2020 y le quedaban un par de años en el cargo". Tras ello, se esperaba que Méndez regresara al Ministerio de Relaciones Exteriores (Mirex) del país de origen para el stage posterior a un servicio internacional. Ese ínterin anticipa otro nombramiento, explican las mismas voces.
Ahora, no obstante, desde Exteriores se presiona para acortar el encargo del legado en la Ciudad Condal. Se actúa en base al "perjuicio" de la imagen exterior, el agravio a la comunidad latinoamericana en Cataluña y el "escándalo mayúsculo" que ha causado el suceso entre la pequeña comunidad consular barcelonesa, muy conectada por medio del Cuerpo Consular de Barcelona, uno de los más numerosos del mundo en una ciudad no capital de Estado. Lo dirije Yosef David Sánchez, cónsul de Israel.
Investigación oficial
Por el momento, la llamada Cancillería no ha tomado decisión alguna pese a los mensajes discretos enviados por la contraparte española. Sí han anunciado que el Consulado General de la República Dominicana en Madrid ha iniciado una investigación para aclarar los hechos. Tras conocer ese informe, se tomará una decisión sobre el representante diplomático.
Por su parte, el propio Méndez rebajó ayer el incidente de L'Hospitalet en los medios del país de origen y lo ciñó a un "roce" con otro vehículo el pasado 2 de julio. Negó conducir ebrio y sostuvo que no quiso someterse a un control de alcoholemia por parte de la Guardia Urbana de L'Hospitalet porque el alcohotest "era voluntario". Acabó denunciado.
Zozobras diplomáticas
Mientras duran las pesquisas oficiales, la borrachera del cónsul caribeño ha sacudido la pequeña pero influyente comunidad diplomática catalana. El último gran episodio que sacudió la red política y de negocios fue la participación de un diplomático francés --no vinculado al Consulado de Francia, aclaró la legación-- en la intoxicación masiva con droga en una sauna del Gaixample, el barrio gay de Barcelona en primavera de este año, avanzó Crónica Global.
Mucho más grave fue el plantón que dio la anterior cónsul china en Barcelona al Govern. Lin Nan se marchó de la capital catalana sin despedirse de la Generalitat en 2022. Antes, el Govern había flirteado con una protesta en favor de los independentistas de la región especial de Hong Kong al calor del procés.
La inseguridad, problema
Anteriormente, el Cuerpo Consular había manifestado su preocupación por otro asunto importante: la crisis de seguridad pública que vivió Barcelona durante el segundo mandato de la alcaldesa Ada Colau (BComú). Dos ejemplos: el Consulado General de la República Popular China se quejó a los Mossos d'Esquadra tras el homicidio de un conciudadano en 2021.
En una reunión en febrero de 2021, los enviados también protestaron contra el auge de hurtos, robos y peleas ante el anterior gobierno municipal en una reunión a puerta cerrada. Se lo dijeron en persona a la ex primera edil en un encuentro sin periodistas.