Una cumbre al más alto nivel allanó el camino para que los comunes apoyaran, sin exigir nada a cambio, al candidato socialista Jaume Collboni como alcalde de Barcelona. Una cumbre in extremis celebrada el viernes en Madrid que dio un vuelco a la situación pues, horas antes de que se constituyera el Ayuntamiento de la capital catalana, el acuerdo entre Junts per Catalunya y ERC apuntaba a Xavier Trias como nuevo alcalde.
El candidato del PSC a la alcaldía de Barcelona, Jaume Colboni (i), y el primer secretario del partido, Salvador Illa (d), en la noche electoral
En esa reunión, según ha podido saber Crónica Global, participaron el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; el primer secretario del PSC, Salvador Illa, y la líder de Sumar, Yolanda Díaz.
Buenas relaciones entre Colau y Díaz
No fue fácil convencer a la ministra de la necesidad de impedir que el independentismo asaltara la Ciudad Condal mediante un gesto de generosidad de los comunes. Es conocido que las relaciones entre Díaz y Ada Colau, que ha gobernado la ciudad durante ocho años, son excelentes. Y que Barcelona es la gran capital española que les quedaba a la confluencia de izquierdas, de ahí la resistencia a cerrar un acuerdo con el PSC que les excluyera de la alcaldía, pues ese era precisamente el precio que el PP exigía para apoyar a Collboni.
Eloi Badia (1d) y Janet Sanz (2d) con la alcaldesa Ada Colau (i), en un acto de Barcelona en Comú
Un precio que, en la recta final de las negociaciones para constituir el Consistorio, los comunes no estaban dispuestos a pagar. No aceptaban, decían, que los populares impusieran sus condiciones.
Cerrar el paso al independentismo
Sin embargo, que Trias --por mucho perfil moderado que ofreciera escondiendo las siglas de Junts-- y ERC se hicieran con la alcaldía equivalía a permitir que el independentismo asaltara Barcelona por primera vez desde que se constituyeron los ayuntamientos democráticos. Lo intentó en 2019, cuando ERC ganó las elecciones, pero el acuerdo entre Colau, PSC y Barcelona pel Canvi –el partido de Manuel Valls—lo impidió.
Salvando las distancias, Sánchez e Illa apostaban por repetir esa operación Valls, que en esta ocasión ha tenido al PP como protagonista clave. La reunión con Díaz apuntaba en esa dirección. Para la ministra y Colau, el escollo era acceder a las exigencias de los populares. Fuentes consultadas aseguran que la inclusión del núcleo duro de la ya exalcaldesa en la lista de Sumar por Barcelona --Gerard Pisarello, Gala Pin, Eloi Badia…-- ha sido la oferta que Colau no podía rechazar a cambio de permitir que Collboni fuera alcalde, sin que los comunes formaran parte del gobierno municipal.
¿Reunión Cerdán-Feijóo?
En paralelo, algunas fuentes apuntaban a contactos entre el secretario de organización del PSOE, Santos Cerdán, y el secretario general del PP, Elías Bendodo que habrían también desencallado el apoyo de los populares a Collboni, pero los socialistas precisaron que Bendodo interlocutó directamente con el PSC.