Nervios en el equipo de la alcaldesa Ada Colau por el último estudio de seguridad del RACC. El Ayuntamiento de Barcelona ha arremetido contra el club automovilístico por denunciar que es "menos seguro andar por Barcelona que hace cuatro años", como afirman el 72% de los encuestados por la entidad.
La número dos de Colau, Janet Sanz, ha acusado al RACC de "entrar en campaña" por su estudio presentado este miércoles, que recoge además que el 80% de los ciudadanos cree que el tráfico ha empeorado en el mismo periodo. La teniente de alcaldía de Movilidad ha evitado hacer autocrítica tras conocer los datos y ha asegurado que el club utiliza datos "desfasados" y sin "rigor".
"Hay una mejora sostenible"
La concejal de los comunes ha afirmado que "hay una mejora clara en la movilidad sostenible de nuestra ciudad" y que "Barcelona no tiene que hacer menos, tiene que hacer más", al ser un municipio que "empuja" con sus políticas al resto de administraciones. "Sabemos que el RACC representa unos intereses, respetables y legítimos, pero unos intereses concretos", ha manifestado.
Sanz ha añadido que los conductores de vehículos privados están sobrerepresentados en la encuesta, ya que son 900 de las 2.000 personas entrevistadas y que únicamente el 20% de los desplazamientos en la ciudad se llevan a cabo en este tipo de transporte. "Barcelona no puede bajar la guardia respecto del ruido, la contaminación y el calor", ha defendido.
Déficit de transporte público
Según el informe, el 80% de barceloneses cree que la congestión del tráfico en la ciudad ha empeorado en los últimos cuatro años, y un 65% considera que empeorará durante los próximos cuatro. El presidente del RACC, Josep Mateu, ha destacado que un 61% de los encuestados piensa que la circulación ha empeorado también en las Rondas de Barcelona en el mismo período de tiempo.
El club ha señalado que la percepción de agravamiento de la congestión y las perspectivas negativas se produce en un contexto donde aumenta la gente que necesita desplazarse para trabajar, cada vez a más distancia de su domicilio. Además, el 50% de los usuarios del vehículo privado tienen una alternativa razonable de movilidad colectiva para hacer el desplazamiento, pero que la perciben como un servicio poco ágil y poco fiable.