En plena polémica por el decreto de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, para romper relaciones con Israel de forma temporal (como “gesto contundente para invitar a trabajar por la paz”), el Ayuntamiento de la Ciudad Condal estrecha lazos con Palestina. La concejal de Derechos Sociales, Justicia Global y Feminismos y LGTBI, Laura Pérez, ha recibido este miércoles a una delegación del gobierno municipal de Nablus (Cisjordania) con el objetivo de solidificar el trato con la localidad, que empezó en el año 2005 a raíz de varios proyectos de intercambio.
Por su parte, los grupos de Junts, PP, Ciudadanos y Valents han forzado la convocatoria de un pleno extraordinario para este viernes a las cuatro de la tarde en el que pedirán que se reanuden las relaciones con el país. La ruptura ha implicado, entre otras cosas, el fin del hermanamiento de la capital catalana con Tel Aviv, firmado en 1998.
Nuevas líneas de cooperación
Tal como ha informado el Ayuntamiento en un comunicado, la delegación palestina se reunirá con responsables de las áreas de residuos y limpieza, proyectos urbanos y relaciones internacionales. También tiene programada una visita a los Bomberos de Barcelona.
La finalidad de la visita es “trabajar en la posibilidad de establecer nuevas líneas de cooperación e intercambio técnico entre ambas ciudades” para este año 2023. Según ha señalado el gobierno municipal, en el acto se ha hecho un seguimiento del proyecto “Transversalización de género y empoderamiento económico en la municipalidad de Nablus”.