El candidato del PSC para la alcaldía de Barcelona, Jaume Collboni, arranca la campaña. Y lo ha hecho anunciando el fichaje del exdiputado de Catalunya Sí que es Pot, Lluís Rabell, como una estrategia para atraer a votantes descontentos con la actual alcaldesa Ada Colau. Rabell --que en 2015 fue cabeza de lista de los comunes en el Parlament-- será uno de los hombres fuertes dentro del grupo municipal. De hecho, según ha avanzado El Món a Rac1, el socialista lo incorpora con la intención de que ostente el rango de teniente de alcalde con responsabilidades en el desarrollo del Plan de Barrios y en el área de Participación Ciudadana.
Es el primer anuncio de Collboni desde que se liberó de sus compromisos como primer teniente de alcalde de la Ciudad Condal y una de sus estrategias para quitarle votos a Barcelona en Comú, con quien podría empatar en las urnas, tal y como apuntan las encuestas. El alcaldable comparecerá a las 12:00 horas en la sede del PSC para presentar a Rabell como "integrante de su candidatura", según han informado en un comunicado.
La influencia de Rabell en los barrios
Cabe recordar que Lluís Rabell fue cabeza de lista de Catalunya Sí que es Pot, la confluencia de Iniciativa per Catalunya Verds (ICV), Esquerra Unida y Podemos en las elecciones autonómicas de 2015. Previamente, presidió la asociación de vecinos de l’Esquerra del distrito del Eixample y la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB). No es la primera vez que se acerca al PSC: de hecho, en la precampaña de las municipales de ese mismo año, apoyó a Collboni en un acto en el que reivindicaba y asumía el legado de ICV y pidió públicamente a Colau que aceptase los votos de Manuel Valls para lograr la alcaldía y formar un gobierno de izquierdas. Además, cabe recordar que junto al que fue el número dos de su grupo parlamentario, Joan Coscubiela, Rabell se caracterizó por oponerse a la vía unilateral hacia la independencia emprendida por Junts pel Sí.
Así pues, con este movimiento, el PSC pretende reconquistar la alcaldía de la capital catalana. Ese es el motivo por el que hace unas semanas Jaume Collboni anunció por sorpresa que abandonaba el gobierno municipal para centrarse en la campaña, liberándose así de las cadenas de la gestión municipal que no le permitían exponer con libertad sus posicionamientos.
Unos sondeos que pronostican empate técnico
"Lo hago para dedicarme al 100% a construir una candidatura sólida, ilusionante, seria y de mayorías, que tenga como objetivo abrir una nueva etapa en Barcelona", expresó en una rueda de prensa para justificar su decisión. Una decisión muy criticada por parte de los partidos de la oposición, especialmente por Ada Colau, que le recriminó que dejase sus responsabilidades a cuatro meses de las elecciones "por intereses partidistas".
Con el fichaje de Rabell --que pronto cumplirá 69 años--, Collboni ha dado el pistoletazo de salida a una campaña electoral que se prevé reñida y en la que aspira a atraer no solo a los votantes de Barcelona en Comú, también a los de Xavier Trias. Y es que los sondeos, hoy por hoy, pronostican una victoria al candidato de Junts y también una situación de empate técnico entre los comunes y el PSC.