La Generalitat pone en marcha la C-555, una nueva carretera para Lleida. Como parte de la nueva imagen de impulso a las infraestructuras que intenta abanderar el Govern de ERC con el rescate del Eix Transversal o la ampliación de los Ferrocarriles, el consejero de Territorio ha inaugurado hoy la vía en el micropueblo de Pinós.
El conseller Juli Fernàndez ha destacado que la vía "además de hacer la vida más fácil a los vecinos, ayudará a que la gente conozca el Solsonès y lo haga más competitivo".
Cuatro millones de euros
Esta carretera de ocho kilómetros ha costado cuatro millones de euros y reforzará la conexión de Pinós. Se trata de un minúsculo pueblo de la comarca del Solsonès, en Lleida, que, junto a los otros cuatro núcleos de población que integran el municipio, tiene un total de 290 habitantes.
La inauguración oficial se ha llevado a cabo después de que hayan finalizado las obras de la C-555, un antiguo vial municipal de Pinós (Lleida) de ocho kilómetros que a partir de ahora forma parte de la red de carreteras de la Administración autonómica.
Ensanchamiento de la vía
La puesta en marcha de esta infraestructura, que ha supuesto una inversión de unos cuatro millones de euros, sirve para enlazar la B-300 y la BV-3002, han supuesto la ampliación de la calzada y la mejora del firme para favorecer la seguridad.
Las obras han permitido ampliar de cinco a siete metros de ancho la carretera y habilitar dos carriles de circulación de tres metros.