El consejero de Salud aumentará el presupuesto de la atención primaria ante la amenaza de huelga

El nuevo conseller de Salud Manuel Balcells tendrá que gestionar una compleja situación poco después de asumir su cargo. Ante la amenaza de una huelga de médicos en la sanidad pública catalana, ha anunciado que prevé dedicar el 25% del presupuesto de sanidad a la atención primaria en un periodo de “dos o tres años” hasta alcanzar el objetivo de forma gradual.

Balcells ha expresado en una entrevista en El País que el presupuesto contemplado por la Consellería para 2023 “sería ideal”, dado que cifra en 1.000 millones de más los recursos que incorpora. “Tendremos 1.000 millones más para Salud. A diferencia de Madrid, aquí pretendemos potenciar la salud pública”, ha expresado.

Las condiciones "claman al cielo"

Sobre la posibilidad de que las protestas de los médicos madrileños se extiendan a la sanidad catalana, Ballcells ha expresado que “los caminos de Madrid y Cataluña son totalmente diferentes”, sobre todo en lo que se refiere a privatización. “La situación sanitaria de Madrid no tiene nada que ver con Cataluña, porque aquí pretendemos internalizar servicios y potenciar la sanidad pública”, ha subrayado.

Aunque asume que es necesario mejorar las condiciones salariales y laborales de los profesionales, no cree que en Cataluña fuese reproducible la situación a la que ha llegado Madrid. No obstante, anuncia que los convenios se están negociando para mejorar unas situaciones que, en sus palabras, “claman al cielo”.

"Complicado" sobrevivir sin presupuestos

Balcells también ha dicho querer internacionalizar el servicio del 061 y ha abogado por reducir la duración del contrato de licitación y eliminarlo tras el primer año: "Si pudiera lo haría hoy mismo, pero no tiene sentido perder el dinero de la licitación".

Asimismo, ha descartado recurrir al copago para equilibrar las cuentas y decretar recortes para 2023. El conseller confía en que se llegue a un acuerdo con los presupuesto porque de lo contrario, advierte, “no tendríamos los instrumentos para desarrollar nuestro programa. Se puede sobrevivir con las cuentas prorrogadas, pero es más complicado”.