La consellera de Universidades, Gemma Geis, será la vicepresidenta provisional del Govern. Así pues, sustituirá a Jordi Puigneró, cesado por el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, tras la amenaza de JxCat de proponerle una cuestión de confianza. De esta forma, se evitará que queden bloqueados los trámites que necesitan la firma de este Departamento, ahora vacante.
La ley de Presidencia de la Generalitat y del Govern prevé que, en el caso de que quede vacía la silla de un consejero, el presidente es el encargado de elegir a otro para que se ocupe, de forma provisional, de sus gestiones. Lo hará Geis, miembro del núcleo duro de la presidenta del partido Laura Borràs, partidaria de la ruptura con ERC.
Campaña en JxCat
Este cambio llega horas después de que el president y el secretario general de JxCat, Jordi Turull, se levantasen de la mesa sin llegar a un acuerdo sobre el futuro de la coalición. Por el momento, el canal de comunicación entre los dos socios no ha dado frutos y, por tanto, Junts someterá la continuidad del Ejecutivo autonómico a su militancia los próximos días 6 y 7 de octubre.
Como ha avanzado El Món a Rac1, este lunes los posconvergentes se reunirán en una ejecutiva crucial. No sólo se decidirá la pregunta para trasladar a los militantes, sino que cuadros importantes del partido --consellers y alcaldes-- anunciarán su intención de iniciar una campaña para convencer a la militancia de que se debe continuar en el Govern para no poner en peligro el futuro del partido y, además, para no dar a ERC el mando del gobierno.
Una de las protagonistas será la consellera de Acción Exterior, Victòria Alsina, que este fin de semana se afilió al partido para poder asistir a la reunión de la ejecutiva, donde defenderá la continuidad en el Ejecutivo autonómico. Por otro lado, pase lo que pase esta semana en la consulta, desde las filas republicanas ya han confirmado que no habrá elecciones anticipadas en Cataluña.
Sesión de control
Con todo, se presenta una semana decisiva para el futuro del Govern. Además, teniendo en cuenta que este miércoles el president deberá enfrentarse a una sesión de control en el pleno del Parlament donde, además, se votará una moción de la CUP en la que se le pide que se someta a una cuestión de confianza.
Según Rac1, el equipo de Aragonès está "preparado para afrontar todos los escenarios", incluso si saliese JxCat del Govern. En ese caso, ERC debería ocupar sus 160 cargos, que van desde los secretarios generales, secretarios, directores y personal de confianza.