Crecen los rumores de ruptura: Aragonès cancela su agenda tras la amenaza de Junts

Crecen los rumores de ruptura en el Govern. El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha cancelado su agenda prevista para este miércoles tras la amenaza de JxCat de someterle a una cuestión de confianza. Según el Departamento de Presidencia, el president estará en Palau, donde mantendrá "varias reuniones" con los miembros de ERC. Así pues, ha anulado los actos previstos en Gurb (Osona) y Berga (Barcelona), donde estaba previsto que acudiese con el conseller de Educación, Josep Gonzàlez-Cambray.

De hecho, la portavoz de ERC Laura Vilagrà también ha suspendido su presencia pública. Lo que indica que las filas republicanas meditarán sobre la oferta de sus socios, que tensaban la cuerda este martes en el debate de política general. 

Una "oportunidad" para la estabilidad

La tensión entre ERC y Junts se cortaba con un cuchillo en el hemiciclo cuando el portavoz de JxCat, Albert Batet, anunció que su grupo pedirá al president someterse a una cuestión de confianza si no aclara con mayor "concreción" cómo cumplirá el acuerdo de gobierno que ambas formaciones sellaron en 2021. Considera que los republicanos están incumpliendo tres puntos "esenciales" del pacto de investidura.

Eso es, la unidad entre las fuerzas independentistas en las Cortes Generales españolas; la negociación de una "amnistía y autodeterminación" en la "mesa de diálogo" con el Gobierno; y la reactivación del denominado "Estado mayor" del procés.

La confianza, rota

Este miércoles, de nuevo, Batet ha insistido en que se trata de una "oportunidad" para dar estabilidad al Govern, aunque desde ERC lo rechazan frontalmente. "No entraré en ningún juego que someta a las instituciones catalanas a una incertidumbre y a una interinidad que los ciudadanos de Cataluña no merecen", expresó Aragonès, que sigue insistiendo en que no se someterá a una cuestión de confianza.

Tras esta propuesta, que pilló desprevenidos a los diputados republicanos, el president retó a Junts a tomar las decisiones que consideren oportunas. De hecho, considera que el simple hecho de plantearla supone "retirar la confianza" al Govern y al jefe del Ejecutivo autonómico. 

Con todo, este miércoles las miradas están puestas en el Palau, donde se reflexionará sobre el futuro del Govern y su ruptura, que podría ser inminente.