La Assemblea Nacional Catalana (ANC) parece haber encontrado en Carles Puigdemont (JxCat) la buena sintonía que ha perdido con los actuales dirigentes de la Generalitat, más en concreto con los de ERC. La presidenta de esta entidad privada ultranacionalista, Dolors Feliu, se ha desplazado este viernes al sur de Francia para trasladarle al prófugo su exigencia de declarar la secesión unilateral de Cataluña (DUI) en la segunda mitad de 2023, y "encarar" junto a él la manifestación del próximo 1 de octubre, para conmemorar el quinto aniversario del referéndum ilegal y unilateral de 2017.
Según fuentes de la ANC, la reunión con el expresidente de la Generalitat fugado en lo que llama "la Cataluña norte" se ha prolongado durante casi una hora y ha sido "positiva y provechosa". Además de poner sobre la mesa todos los escenarios de una hipotética declaración de independencia, el encuentro ha servido, sobre todo, para abordar la movilización del próximo 1-O, que organiza el Consell per la República --una entidad privada creada y presidida por el propio Puigdemont-- junto a la ANC y otras asociaciones afines.
"Puesta en común"
Del buen clima entre ambas partes da cuenta la ANC en sus redes sociales, donde además de publicar una imagen de la propia Feliu junto al prófugo, asegura que éste "ha valorado muy positivamente el éxito de la Diada. Han puesto en común los puntos estratégicos y han valorado los diferentes escenarios, como también la importancia de un nuevo éxito el 1 de octubre" (sic).
En la misma línea, el Consell per la República ha señalado que la reunión entre Puigdemont y Feliu "después del éxito" (sic) de la manifestación de la ANC del pasado 11 de septiembre ha servido para "poner en común puntos estratégicos y encarar el gran acto" del próximo 1 de octubre en el Arco de Triunfo de Barcelona.
La reunión llega después de que esta misma semana Feliu --exmilitante de Convergència (CiU) y miembro de los servicios jurídicos de la Generalitat-- protagonizara un nuevo choque con el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, que descartó tomar en consideración su plan para proclamar una DUI en 2023.