Vestida de blanco impoluto, ajena a las peticiones de dimisión por su imputación judicial, Laura Borràs ha acusado al Estado español de usar la corrupción para manchar a los adversarios políticos. La presidenta del Parlament ha inaugurado la II Cumbre contra la Corrupción que se celebra hoy en la Cámara acusando a España de ser una "democracia viciada" con "tics autoritarios" que "acosa" a los disidentes.
Borràs ha protagonizado una breve master class sobre corrupción en plena polémica sobre su negativa a dimitir tras acabar la instrucción donde aparece imputada por malversación, prevaricación, fraude y falsedad. Todos los grupos, excepto Junts per Catalunya (JxCat), han pedido su cese para preservar el prestigio de la institución que representa. El president, Pere Aragonès, evitó apoyarla el pasado miércoles en la sesión de control del gobierno del pleno del Parlament, y aseguró estar convencido de que se actuará de forma acorde a la vocación de servicio público.
El reglamento de la Cámara catalana contempla el cese de un diputado en caso de procesamiento o apertura de juicio oral. En los próximos días, el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña se pronunciará sobre esa situación procesal.
Cita de Churchill
La líder de JxCat ha comenzado su intervención citando a Winston Churchill, quien, ha recordado, definió la democracia como el menos malo de los sistema políticos. Una afirmación que, según la presidenta del Parlament, "destila cierto grado de resignación. Si nos conformamos con esas imperfecciones, no seríamos buenos demócratas". La política independentistas ha advertido de que la "corrupción es el principal enemigo de la democracia porque erosiona la confianza de los ciudadanos" y "degrada las instituciones".
En este sentido, ha avisado de los "efectos devastadores" de la mala praxis política, que "deben ser analizados" en foros como el que se celebra en la Cámara catalana, "fruto de la voluntad de trabajar juntos entre la sociedad civil y los representantes institucionales, entre el compromiso del Parlament por la transparencia y la voluntad de cambio de la sociedad catalana. Prevenir es mejor que curar".
Sin embargo, Borràs cree que "la democracia también está acosada". "Ayer vivíamos una muestra en el Parlament", ha dicho, en referencia al voto delegado del fugado Lluís Puig, prohibido por el Tribunal Constitucional, pero que fue contabilizado por decisión de ERC, JxCat y CUP. "En los países avanzados se ha consolidado la separación de poderes. Pero en las democracias viciadas, la corrupción puede ser un arma para combatir la disidencia política", ha dicho la presidenta de la Cámara catalana.
"La corrupción de la lucha contra la corrupción"
Al respecto, ha acusado al Estado español de tener "tics autoritarios", practicar el "lawfare como una estrategia de represión" y de "manchar a los adversarios políticos con la corrupción".
"Es la corrupción de la lucha contra la corrupción", ha concluido.