El PSC no apoyará el decreto ley del Govern sobre el modelo de uso lingüístico en las escuelas si su voluntad es la de “esquivar o incumplir” la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que obliga a impartir, como mínimo, un 25% de las horas lectivas en castellano.
Así lo ha dicho la viceprimera secretaria de los socialistas, Lluïsa Moret, después de que la Generalitat haya aprobado el nuevo decreto ley que fija los criterios de los proyectos lingüísticos de los centros. Unos requisitos que no dependerán de porcentajes, tal y como ha anunciado la portavoz Patricia Plaja.
Una ley "fruto del nerviosismo"
Con la nueva norma, la Generalitat asume la responsabilidad sobre los proyectos lingüísticos de los centros, para proteger a los directores y a los docentes ante la sentencia del TSJC.
Moret considera que se trata de “una improvisación del Govern para esquivar la sentencia”. “Más allá de que nos gusten o no nos gusten, las sentencias se tienen que cumplir”, ha advertido. Por eso, ha anunciado que su partido no apoyará una ley “fruto del nerviosismo” si la “voluntad es esquivar o incumplir” la orden de los tribunales.