Los profesores se movilizan masivamente contra Cambray en una huelga con tensión

Indignación. Es la palabra que define la primera jornada de la huelga de la comunidad educativa y que ha acabado delante de la Conselleria de Educación bajo un clima de tensión. Profesores de la educación pública y de la concertada, así como el personal laboral han inundado las calles de Barcelona para protestar por la “mala gestión“ y la "falta de respuesta y propuestas" del conseller Josep Gonzàlez-Cambray. Unas 22.000 personas, según cifras de la Guardia Urbana. 

Los sindicatos denuncian la “cadena de despropósitos” de la Generalitat, desde los recortes que hicieron hace 10 años y que no se han revertido, pasando por la exigencia de un nivel de catalán C2 para quienes quieran ejercer en Cataluña a partir de 2024, hasta el cambio del currículum o el avance del curso escolar al 5 de septiembre en Infantil y Primaria, y al 7 en la Secundaria y Bachillerato. 

Una huelga histórica 

Esta última decisión de Cambray ha sido la gota que ha colmado el vaso, y que ha llevado a todos los sindicatos a una huelga “histórica” porque ha reunido a todo el sector. De hecho, desde Ustec, Iolanda Segura, cita en un 60% el seguimiento de la convocatoria, mientras que en el caso concreto de la Secundaria, supera el 75%, según datos del sindicato Profesores de Secundaria. 

Protesta de profesores en Vilanova i la Geltrú en el primer día de huelga en la Educación / NC - CG

A los docentes de Cataluña se les ha acabado la paciencia ante un conseller que “solo hace marketing” y no cuenta con los profesionales a los que representa. Por eso, de forma unánime, los sindicatos exigen la dimisión del titular de Educación si éste no es capaz de sentarse a negociar. “Pero no queremos perder el tiempo. Queremos negociar con una propuesta ya hecha”, advierten desde Ustec. Y esto pasa por paralizar el nuevo calendario. Algo a lo que, hasta ahora, se ha negado el consejero al considerarla una medida buena para los alumnos y las familias. 

Un punto de inflexión 

Los docentes aseguran que la huelga, que durará cuatro días más, será un “punto se inflexión” que esperan que concluya con una dimisión. “La educación tiene que trabajarse con calidad, con consenso y con toda la comunidad educativa” reclaman desde UGT. 

La primera jornada de huelga ha superado las expectativas de los sindicatos. A pesar de los servicios mínimos, cientos de profesores se han hecho oir en la Ciudad Condal contra un conseller tildado de “incompetente” que todavía no se ha pronunciado. Pero sí se ha dejado ver la unidad de antidisturbios de los Mossos d’Esquadra, que han salido a recibir a los docentes que han llegado de forma masiva delante Via Augusta reclamando al titular que dé la cara.