El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha evitado hoy criticar el papel de Laura Borràs en la retirada del escaño al diputado de la CUP, Pau Juvillà, a pesar de las críticas de la oposición a la "falsa desobediencia" de la neoconvergente. "Hay que revertir la represión", ha dicho el republicano, quien tampoco ha valorado los reproches de Junts per Catalunya sobre la falta de unidad de ERC y CUP en este asunto.
En la sesión de control celebrada en el pleno del Parlament Jessica Albiach, presidenta del grupo de En Comú Podem, se ha referido a las acusaciones de Borràs contra el presidente por no apoyarla en el caso Juvillà. “El silencio no es institucional, sino esconder bajo la alfombra un gobierno desnortado. Los Juegos de Invierno son un ejemplo, la purga de los Mossos. Tenemos unas instituciones cada vez más degradadas y una ciudadanía perpleja. Rectifique y vuelva a los grandes acuerdos, por ejemplo en materia de financiación autonómica”.
Rol institucional
"He intentado ceñirme a mi rol institucional --ha respondido Aragonès--. El Govern respeta la labor de los órganos parlamentarios. Hay división de poderes. Nos hemos ido liando con estas polémicas, que tiene dos orígenes: que se inhabilite a un diputado solo por mantener un lazo amarillo en una campaña electoral, algo desproporcionado, vulnera el derecho a la tutela jurídica efectiva. Debemos trabajar para revertir esta situación”.
Sobre los grandes acuerdos, ha insistido en su apuesta por el diálogo para solucionar el conflicto político catalán, pero “no encuentro respuesta por parte del Estado”.
Por su parte, el líder catalán de Ciudadanos, Carlos Carrizosa, ha reprochado al Govern los gastos en viajes de la Consejería de Acción Exterior. “Tenemos dudas de que el objetivo sea el impulso de la economía o la cultura catalana”, ha dicho. Y ha puesto como ejemplo un viaje a Suiza en noviembre de 2021 para “premiar a sus alcaldes acólitos”. En septiembre y octubre “se gastaron 12.000 euros para ver a Carles Puigdemont y usted se gastó 3.000. ¿Pagar dinero para una reunión con un fugado?”.
El president ha reprochado a Carrizosa que haga espectáculo porque hay elecciones en Castilla y León. Ha asegurado que todas las acciones exteriores se hacen en base a las competencias de la Generalitat. “Nos reuniremos con quienes no pueden volver por culpa de la represión que ustedes han instigado”.
Tensión en la intervención de Vox
El líder de Vox, Ignacio Garriga, ha hablado de “reparto de carguitos”, en referencia a la renovación de los cargos institucionales como el CAC, la Sindicatura de Cuentas o la CCMA.
Aragonès cree que a Vox “no le gusta la democracia”, pero si “engañar a los vulnerables. Les gustaría cerrar, no ya TV3, sino este Parlament, y no lo lograrán”. Borràs ha llamado la atención al diputado de Vox Antoni Gallego por insultar a Aragonès. El parlamentario se ha disculpado, pero ha reprochado al republicano que en cada sesión tilde de nazi a su grupo.
Hoja de ruta independentista
Albert Batet, presidente del grupo de Junts per Catalunya, ha agradecido al presidente de la Generalitat la voluntad de consensuar la hoja de ruta del independentismo. “Tenemos un mandato muy claro, el 5% de la ciudadanía dijo sí hace un año a la independencia y a vivir plenamente en catalán. Pero no podemos sentirnos orgullosos. No estamos dando pasos, la mesa de diálogo no lleva a ningún lado”, ha dicho. Aragonès ha abogado por “hablar menos de nosotros y más del país”.
Josep Maria Jové, en nombre de ERC, ha hecho piña con Aragonès en su estrategia de diálogo, así como en la necesidad de grandes consensos. El presidente catalán ha asentido.