Quien quiera clases en castellano, que se vaya a Salamanca. Ese ha sido uno de los últimos mensajes ultranacionalistas difundidos en el programa Bricoheroes de TV3. Un espacio supuestamente humorístico célebre por la hispanofobia de sus presentadores --Jair Domínguez y Lluís Jutglar Peyu, que a su vez es productor del mismo--, y que en los últimos años ha protagonizado diversas polémicas como, por ejemplo, repetir en varias ocasiones el exabrupto "puta España" en sus emisiones o, más recientemente, haber calificado de ladrones a españoles y gitanos, sin que los responsables de televisión pública de la Generalitat les hayan amonestado nunca públicamente por ello.
Así, en su emisión semanal del pasado fin de semana, Bricoheroes volvió a protagonizar varias salidas de tono de corte xenófobo como, por ejemplo, invitar a marcharse de Cataluña a aquellos alumnos que reclamen su derecho a estudiar también en castellano, lengua cooficial de la autonomía. En el gag en cuestión, Peyu dijo haber estudiado un primer curso en la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) y presenciado cómo, después de que una profesora preguntara a la clase si todos entendían el catalán, una estudiante rusa le dijo que no. Algo que indigna al empresario televisivo, según el cual esta alumna "sólo venía a emborracharse por las noches". "La clase en catalán en la Autónoma, y el que quiera clase en castellano, mira, la Universidad de Salamanca es bien bonita", sentenció Peyu en su programa de TV3.
Burlas a los pakistanís y andaluces
En ese mismo episodio, Peyu se mofó de los pakistanís afirmando que son blancos, pero que se les ha oscurecido la piel por el calor de los kebabs que cocinan; también se calificó de "quillos" a las personas que descuelgan banderas y otros símbolos secesionistas catalanes de los espacios públicos; y se sugirió que los andaluces --en concreto, los sevillanos-- siempre tienen ganas de fiesta.
Sobre este último punto, cabe apuntar que, en el capítulo anterior de este mismo programa semanal dirigido a un público juvenil, ya se burlaron de los andaluces en un gag en el que Jair Domínguez se arrodillaba ante una mancha de humedad que le recordaba a una casa de Jesucristo: “zeñó, ze lo pido, zeñó, póngame una caza, zeñó, lo de la zalú, lo del amó, cómo lo tengo”, decía, ridiculizando así el acento andaluz.
Llaman ladrones a españoles y gitanos
Semanas antes, Peyu y Domínguez protagonizaron otro gag en el que decían temer que "un español" les entrara a robar el plató. "Yo tengo un perro que huele españoles", llegaba a afirmar Peyu. Y otro tanto ocurrió a principios de enero, en un gag en el que ambos bromeaban sobre la forma de una circunferencia de madera. Al verla, Domínguez comentó lo siguiente: "Parece una rueda de carro del escudo gitano". Ante lo cual, Peyu respondió: "Ahora, ponemos esto en la entrada y no nos entrará nadie a robar. Si no pusiera esto, te lo roban, ¿eh? Ellos".