Los dirigentes de la Generalitat continúan lanzando piedras sobre su propio tejado a la hora de reclamar que Cataluña sea sede de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2030. A su enfrentamiento con Aragón por su pretensión de "liderar" una candidatura conjunta --que ha propiciado la indignación del presidente de esta autonomía vecina, Javier Lambán, quien reivindica un proyecto en condiciones de igualdad--, se suman ahora muestras de desprecio hacia Aragón por parte de un destacado dirigente secesionista.
Se trata del diputado de Junts per Catalunya (JxCat) Joan Canadell, que a raíz de la decisión de Lambán de suspender una reunión con su homólogo catalán, Pere Aragonès (ERC), por su "falta de respeto" sobre los Juegos, ha espetado lo siguiente: "Más fácil nos lo pone... si Aragón quiere unos juegos, que presente una candidatura sola, o con Madrid. Nosotros a la nuestra y que gane el mejor. De momento, Barcelona a la primera, Madrid tres negativas", ha manifestado Canadell. Algo que, por otra parte, no es cierto, pues Barcelona ha presentado cinco veces su candidatura para unos Juegos Olímpicos de verano a lo largo de la historia.
El exabrupto del diputado de JxCat ha sido aplaudido por numerosos usuarios secesionistas en Twitter, aunque alguno de ellos le ha llegado a criticar por blando, apuntando que "estos Juegos no representarán a Cataluña, sino al contrario". En su respuesta a este reproche, Canadell ha afirmado: "En 2030 seremos independientes, tanto cuesta de entender" [sic].
Lejos de rectificar, Canadell ha abundado este viernes en la polémica con bravuconadas como "los juegos serán catalanes, con pruebas en cuatro países (Cataluña, España, Andorra y Francia"; "mientras no seamos independientes, tiene que ser el COE formalmente quien los tramita"; y "cuando seamos Estado, pactaremos con los vecinos, los Juegos y otras cosas".
El dirigente ultranacionalista, célebre por su hispanofobia, cuenta con un amplio historial de salidas de tono similares en los últimos años. Uno de los más sonados, por ejemplo, fue cuando, al inicio de la pandemia de coronavirus, afirmó que "España es paro y muerte, Cataluña, vida y futuro". Entre sus excentricidades cuando presidía la Cámara de Comercio de Barcelona figuran algunas como cuando en mayo de 2020 promocionó en TV3 un prototipo de "mascarilla catalana" a la que dio en llamar Maskcat, no homologada y sin ninguna garantía sanitaria; o haberse fotografiado conduciendo en coche llevando una careta del prófugo Carles Puigdemont en la cabecera del asiento del acompañante.