La politización nacionalista de las instituciones y espacios públicos de Cataluña afecta también a las bibliotecas. Así lo demuestra un informe de Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB), con datos que revelan discriminaciones como el hecho de que apenas dos de cada diez nuevos libros adquiridos están escritos en castellano; o el espectacular aumento de las compras de ejemplares dedicados a Cataluña desde 2017 a 2018, cuando se pasó de un total de 159 a 1.229

El informe, al cual ha accedido el diario ABC, revela también muestras de adoctrinamiento político, pues de las compras con temáticas relacionadas con Cataluña su procés secesionista están presente en la mayoría de casos, y la palabra España apenas aparece.

Sólo dos de cada diez nuevos libros, en castellano

Según dicho estudio, la evolución de las adquisiciones por lengua evidencian una "política cada vez más excluyente del español". Así, si en 2017 un 60% de los libros comprados por las bibliotecas eran en catalán, frente a un 40% en castellano, en 2020 se pasó a una desproporcionada relación inversa, pasándose de un 78% de libros en catalán por apenas 22% en castellano.

Desde AEB, asimismo, revelan contrastes como, por ejemplo, que no se haya comprado ningún libro dirigido al público infantil relacionado con la Fiesta Nacional de España del 12 de octubre y, en cambio, se hayan adquirido numerosos títulos dedicados a la Diada, el año 1714 o el 11 de septiembre: ocho en Barcelona o cinco en Girona.

Libro independentista para niños, con prólogo de Carme Forcadell, en la Red Telemática Educativa de Cataluña (XTEC), de la Generalitat / XTEC

Discriminación

En opinión de la entidad constitucionalista, "muchos de estos libros dedicados a la Diada de Cataluña han dejado de ser libros dedicados a la Fiesta Nacional de Cataluña para convertirse directamente en libros que se refieren a la celebración de una Cataluña independiente".

Así, la hegemonía nacionalista se evidencia también en el hecho que el término "Cataluña" aparezca en un 90,4% de los libros estudiados, mientras que "España" apenas sale en un 9,6%.

Según AEB, "esta política de discriminación del español se completa con una selección de libros enfocados hábilmente al público infantil. Libros que, con las píldoras de información necesarias, permiten construir ese relato de agravios de España a Cataluña que coincide con el que describe el Programa 2000 de la etapa de Jordi Pujol"