La hispanofobia y las expresiones de odio no son obstáculo para que los medios de comunicación públicos de la Generalitat --TV3 y Catalunya Ràdio-- continúen contando con Jair Domínguez, presentador de varios de sus programas. El colaborador, célebre por proferir insultos tales como "puta España" en antena, ha vuelto a hacer gala de su ultranacionalismo en una entrevista a Nació Digital en la que, entre otras cuestiones, reconoce haber cortado carreteras en la frontera con Francia durante los sabotajes de la plataforma secesionista Tsunami Democràtic de 2019 y haber tenido "ganas de lanzar cócteles molotov a la Policía Nacional" en el pasado.
Domínguez, además, se muestra convendido de que la denominada "mesa de diálogo" entre el Gobierno y la Generalitat "no sirve para nada", y señala que "las revueltas y las declaraciones de independencia, históricamente, se han conseguido con bombas, explosiones y golpes de machete. Y eso es muy difícil que se consiga de otra manera. Podemos decir que hemos avanzado mucho, que somos un país 2.0. Pero si España te envía un tanque por la Diagonal, se acaba la tontería. Estamos jugando con sus reglas. Tenemos que ser inteligentes", afirma, antes de reclamar la unidad del espacio secesionista y elogiar al exdiputado de la CUP David Fernández.
El presentador de programas como Està Passant o Bricoheroes, entre otros, reconoce además que vivió "un tiempo en que estaba muy encendido y con muchas ganas de lanzar cócteles molotov a la Policía Nacional". Y lamenta que "esto ya no se llevará dentro de cinco años, y nosotros seremos los extraños".
No es la primera vez que Domínguez expresa su odio y habla en estos términos sobre la policía española. En enero de 2019, por ejemplo, explicó en su perfil de Twitter que lo que recuerda con "más alegría" del referéndum ilegal y unilateral de secesión de Cataluña 1-O fue "aquel tío que le tiraba una silla a un poli a la cabeza y lo tiraba al suelo. Ojalá esto cada día", afirmaba.