Un total de 49 municipios catalanes ha renovado este 2021 su calificación como zonas tensas de alquiler. Tras un año de vigencia de la ley autonómica que regula el precio los arrendamientos, el Diario Oficial de la Generalitat de Cataluña (DOGC) ha publicado este lunes la lista completa de localidades autorizadas por la Agencia de la Vivienda de Cataluña para prorrogar el control de precios.
La región que concentra mayor cantidad de municipios es la provincia Barcelona, que suma 25 ciudades. Estas son Barcelona, Badalona, Barberà del Vallès, Begues, Castelldefels, Castellbisbal, Cornellà del Llobregat, El Papiol, El Prat de Llobregat, Esplugues del Llobregat, Gavà, Montcada i Reixac, Montgat, Pallejà, Ripollet, Sant Andreu de la Barca, Sant Boi del Llobregat, Sant Cugat, Sant Feliu del Llobregat, Sant Joan Despí, Sant Just Desvern, Sant Vicenç dels Horts, Santa Coloma de Gramenet, Torrelles de Llobregat y Viladecans.
14 municipios en trámite
Además, 14 localidades del área metropolitana han tramitado su admisión como área de mercado de vivienda tenso: Cerdanyola del Vallès, Cervelló, Corbera de Llobregat, l'Hospitalet de Llobregat, Molins de Rei, La Palma de Cervelló, Sant Adrià de Besòs, Sant Climent de Llobregat, Santa Coloma de Cervelló, Tiana, Begues, Castellbisbal, El Papiol i Torrelles de Llobregat.
Todos los municipios de la conurbación barcelonesa han ampliado las zonas tensas de alquiler durante un periodo de cinco años, el plazo máximo que permite la normativa. Además, la capital catalana ha endurecido el control de precios con una rebaja adicional del 5% sobre el índice elaborado por la Generalitat.
Seis ciudades descartadas
Por otro lado, otras 24 ciudades ubicadas en las provincias de Girona, Tarragona y Lleida han obtenido el mismo estatus para regular los alquileres hasta mediados de 2022. Estas son Blanes, Canet de Mar, Cardedeu, Figueres, La Garriga, Girona, Igualada, Lleida, Manresa, El Masnou, Mataró, Mollet del Vallès, Olesa de Montserrat, Rubí, Sabadell, Salt, Sant Fruitós de Bages, Sant Pere de Ribes, Santa Perpètua de Mogoda, Sant Sadurní d'Anoia, Tarragona, Terrassa, Vilafranca del Penedès y Vilanova i la Geltrú.
Sin embargo, no todos los municipios han conseguido esta calificación. Según recoge la resolución del DOGC, Arenys de Munt, Palafolls, Palau-solità i Plegamans, Sant Julià de Ramis, Sant Quirze del Vallès y Viladecavalls no han cumplido los requisitos exigidos por la normativa y han sido descartados por el organismo autonómico. Además, otros 22 municipios han iniciado trámites para incluirse en la lista.