Jordi Sànchez, secretario general de JxCat, ha reclamado la unilateralidad porque es “un derecho legítimo” cuando un colectivo busca “conquistar un derecho”. Por ello, el político indultado ha instado a “no demonizarla”, aunque de forma similar a lo que expresó la expresidenta del Parlament, Carme Forcadell, ha recordado que quizás no sea el momento: “Otra cosa es si hay que activarla o no”. Otra muestra de una política abstracta a la que el independentismo se ha sumado desde que se pusiera en marcha la mesa de diálogo entre la Generalitat y el Gobierno.
Este debate sobre la unilateralidad “no es nuevo”, ha asegurado el exdirigente de la ANC en una entrevista en Catalunya Ràdio. No obstante, la cercanía de la próxima reunión de la mesa de diálogo la tercera semana de septiembre han convertido al concepto fallido, por el que se declaró la independencia en el Parlament en 2017 de forma simbólica, en un instrumento de presión al Ejecutivo de Pedro Sánchez.
Unilateralidad y escepticismo
“Cuando hay un Estado que niega derechos, reprime y niega la posibilidad de un ejercicio democrático como ir a votar, la unilateralidad se convierte en una herramienta y un derecho legítimo”, ha vuelto a defender Sànchez para reforzar el concepto que, en parte, fue el inicio para que el Tribunal Supremo (TS) juzgara a los líderes del procés, ahora indultados. No obstante, respecto a esta vía única para la independencia ha esquivado confirmar cuando sería activada porque hay que ver “en qué momento y con qué formas” sería mejor.
El secretario general de JxCat que estuvo más de tres años en prisión por su implicación en el 1-O y que hace dos meses recibió el indulto del Gobierno, ha admitido sentirse “escéptico” en relación con los eventuales resultados de la mesa de diálogo. De hecho, siente miedo ante las posibles intenciones ocultas del PSOE por usar “esta mesa para dividir al independentismo y simplemente como una foto”, por lo que ha pedido “ser prudentes y no regalar fotografías”.