La secretaria general adjunta y portavoz de ERC, Marta Vilalta, ha considerado este sábado que es posible una solución a la situación catalana de forma "democrática y política en el marco de este Estado", a través de la amnistía y la autodeterminación.
En declaraciones a los medios en Barcelona, ha defendido que la solución tiene que venir por la vía política: "Esto es en lo que estamos trabajando, con la mesa de negociación y la voluntad de dialogar y de negociar". Aun así, este proceso también “es bueno por sí mismo porque deja ver las contradicciones del Gobierno y del Estado", ha dicho. Una situación que cree que permitirá al independentismo ganar legitimidad a nivel catalán e internacional.
“Amnistía para pasar página”
Vilalta ha pedido que los indultos para los líderes independentistas encarcelados por el 1-O se concedan lo antes posible: "Que dejen de especular, que dejen de hablar de ello, y que se hagan efectivos". En este sentido, ha afirmado que "no nos opondremos a esta acción que puede ayudar a superar el sufrimiento de los presos políticos y de sus familiares", aunque ha remarcado la necesidad de la amnistía para, según ella, pasar página.
En la misma línea, ha asegurado que estos últimos días "ha vuelto a salir la derecha y la extrema derecha para volver a poner en el punto de mira a Cataluña", con la recogida de firmas contra los indultos. "Vuelven a salir otra vez en contra de las soluciones, a favor de que siga la represión, en contra de todas las opciones que estamos ofreciendo", y ha dicho que ERC seguirá defendiendo poder votar sobre el futuro de Cataluña.
Apoyo al referéndum
Vilalta ha expuesto que, según los datos que manejan, tres de cada cuatro catalanes están a favor de un referéndum pactado con el Estado sobre la independencia: "Es esta vía escocesa la que querríamos para nuestro país".
La portavoz ha tratado de dar fuerza a su posición al firmar que "más de la mitad de los votantes del PSC también están a favor de poder ejercer el derecho a decidir", por lo que considera amplia la mayoría que apoya esta vía, y cree que falta “voluntad política”.