El exconseller de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat Josep Rull insinúa haber seguido gobernando o, cuando menos, influenciando en las decisiones de dicho departamento desde la prisión en los últimos años, a pesar de la condena de 10 años y medio de cárcel e inhabilitación absoluta que pesan sobre él al haber sido condenado por sedición en el procés independentista.
Así lo ha apuntado el propio Rull en su perfil de Twitter con un mensaje de despedida al conseller saliente, Damià Calvet, su sucesor en el cargo hasta ahora, y de quien deja entrever que ha sido una suerte de colaborador suyo: "Cierro una etapa apasionante de cinco años sirviendo primero en el despacho oficial del Departamento de Territorio y Sostenibilidad y, después, de la mano del conseller Damià Calvet, desde las cárceles donde he estado cautivo. Ha sido un auténtico privilegio".
Cesado "formalmente"
En ese mismo hilo de mensajes, el exmandatario de JxCat explica también que desde que fue cesado, "formalmente, por el 155 y privado de libertad", Damià Calvet ha ido cada semana a la prisión para "despachar juntos el día a día del departamento. Con él, la figura del conseller legítimo no ha sido ni una quimera ni una ficción", apunta.
Sueldo del PDECat
La confesión de Rull resulta sorprendente, habida cuenta que, además de su reclusión penitenciaria, el exconseller debe cumplir una pena de 10 años y seis meses de inhabilitación absoluta con privación definitiva de todos los honores, empleos y cargos públicos, aunque sean electivos, y la incapacidad para obtener los mismos o cualesquiera otros honores, cargos, o empleos públicos y la de ser elegido para cargo público durante el tiempo de la condena.
En este sentido, cabe recordar que hace un par de semanas trascendió que el anterior partido de Rull, el PDECat, le estuvo pagando un sueldo, tanto a él como también a los exconsellers condenados Jordi Turull y Joaquim Forn, de unos 7.000 euros mensuales a cada uno entre agosto de 2018 y abril de 2020, estando los tres ya en prisión. La formación posconvergente les abonó en total 417.548 euros, según figura en el informe de gestión presentado por el PDECat a su militancia en la asamblea general.