Nuevas acusaciones de espionaje sobre EEUU. Según la cadena Danish Broadcasting Corporation (DR), la NSA (Agencia de Seguridad Nacional norteamericana) habría indagado sobre la compra de un caza-bombardero por parte del Ministerio de Defensa de Dinamarca.
A pesar de que el ejecutivo danés ha rechazado pronunciarse al respecto, la principal televisión del país sostiene que entre 2012 y 2015, Washington obtuvo información sobre sus planes para adquirir aviones de combate. Su objetivo, afirma el citado medio, era que las empresas de defensa europeas optasen por el modelo Lockheed Martin F-35, que licita EEUU.
EEUU contra el "riesgo de espionaje" de Huawei
Una revelación que llega precisamente cuando la administración Trump reclama a los países europeos excluir a la compañía china Huawei de sus redes de telecomunicaciones, bajo la sospecha de que supone un "riesgo de espionaje". Una acusación que algunos medios y analistas califican de "cortina de humo" del Gobierno estadounidense para ocultar o desviar la atención sobre sus actividades de recopilación de información sobre países extranjeros.
Esta no sería la primera vez que EEUU habría espiado la actividad de otros gobiernos. Fue hace siete años cuando saltó el escándalo de Edward Snowden, extrabajador de la CIA y la NSA, que filtró datos secretos para denunciar el espionaje norteamericano sobre la actividad de otros territorios.
Controlar la venta de aviones de combate
Según los datos que aporta DR, son informes de la inteligencia danesa los que muestran la interferencia norteamericana en la actividad del Ministerio de Defensa del país. Según dicha investigación, la NSA se valió "de una colaboración daneso-estadounidense de alto secreto para espiar ministerios y empresas privadas" del territorio del norte de Europa.
Además, el canal apunta que otros aliados de Washington, como Alemania, Francia, Noruega, Holanda y Suecia, también habrían sido objeto de espionaje mediante la misma vía.