Cerca de un millar de personas, la mayoría de ellas convocadas por formaciones radicales independentistas como la CUP, se han concentrado este lunes por la noche ante la Generalitat en la plaza de Sant Jaume de Barcelona para protestar contra el toque de queda decretado por el Govern para intentar frenar la propagación de contagios de coronavirus.
La CUP había realizado un llamamiento en sus redes para acudir a la manifestación "contra el toque de queda y la privación de derechos", tanto en la Ciudad Condal como en otras localidades catalanas.
Los concentrados han exhibido pancartas en las que se leían eslóganes como "recuperemos las calles. Vida antes que capital", "más sanitarios, menos militares" y han coreado consignas como "viva la lucha de la clase obrera". Posteriormente, se han manifestado hasta el parque de la Ciutadella, donde ha concluido su movilización. Junto a este lugar, un grupo de radicales se ha enfrentado a los mossos d'Esquadra y han quemado varios contenedores.
Imágenes de las protestas contra el toque de queda / TWITTER
Presencia de negacionistas sin mascarillas
La formación que, con su abstención, facilitó la investidura de los últimos gobiernos posconvergentes de la Generalitat se había quejado en sus redes sociales de que "no suspenden desahucios ni refuerzan la sanidad ni la educación públicas, pero aplican medidas extraordinarias de estado de guerra".
Mientras se celebraba esta manifestación, un grupo de negacionistas, algunos sin mascarillas, protestó también por las restricciones impuestas para combatir la expansión de los contagios de Covid-19.
Una detenida por atentado contra la autoridad
Los Mossos d'Esquadra detuvieron por atentado contra la autoridad a una mujer que protestaba contra el toque de queda por, presuntamente, insultar y agredir a dos agentes.
La detenida lideraba a un grupo de concentrados que se manifestaban de forma paralela a la protesta convocada por la CUP, con la que han confluido en la plaza, según ha informado la policía catalana.
La mujer se negó a identificarse ante los agentes, que han sufrido heridas al ser presuntamente agredidos mientras trataban de arrestarla.