El conseller de Educación, Josep Bargalló, reconoció hace una semana que un 30% de los grupos de alumnos de las escuelas públicas no podían garantizar la ratio sugerida de 20 chicos por aula, una medida para mantener la distancia social y prevenir los contagios del coronavirus. Con todo, prometió que resolvería la cuestión en dos o tres días. Sin embargo, este lunes se han retomado las clases presenciales y todavía hay uno de cada tres grupos con más estudiantes de los recomendables.

Ahora, en una entrevista en Catalunya Ràdio, el conseller le quita trascendencia a este dato y alega que lo realmente importante es “mantener los grupos burbuja”. No obstante, Bargalló asume que se podrían haber contratado más profesores para solucionar este problema "si la situación presupuestaria fuera otra”. A fecha de hoy, Cataluña cuenta con 56 profesionales educativos positivos por coronavirus y 217 confinados, para los que ya hay sustituto, según Educación.

Cierre de los colegios

De momento, hay tres escuelas que no abren sus puertas en este primer día de colegio: dos por coronavirus y una, en Terrassa (Barcelona), por una plaga de abejas. “Es evidente que no lo hemos hecho todo bien, si hubiese sido así sería preocupante porque significaría que nos estamos equivocando”, ha expresado Bargalló, quien opina que, por el momento, “no ha fallado nada”. 

Por otra parte, el consejero se ha justificado con que la Generalitat sabía que las indicaciones dadas a las escuelas en julio “cambiarían en septiembre”. No obstante, el Govern consideraba necesario que los colegios pudieran empezar a trabajar con algún tipo de guía.

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Material necesario

En caso de aislamiento, los alumnos deberán seguir las clases desde casa, es decir, el grupo no se cerrará educativamente. Es por esta razón que la Generalitat anunció la incorporación de 300.000 ordenadores para los alumnos de cursos superiores a tercero de la ESO y Formación Profesional. 

Por el momento, Educación sólo puede garantizar 40.000 dispositivos de los 80.000 prometidos al profesorado. Los ordenadores de los alumnos todavía no se han adquirido en su totalidad, aunque el conseller asegura que el material “se recibirá antes del fin del primer trimestre”.

Fuera del colegio

Tras otra pregunta, Bargalló ha expresado que las situaciones que más le preocupan sobre los contagios son las que se dan fuera de las horas lectivas. Por un lado, la relajación de los profesores en los momentos en los que no tienen alumnos delante, como durante las reuniones de claustro, son uno de los “puntos calientes”. 

Actividades como las clases extraescolares son otros de los posibles focos. Frente a eso, el conseller de Educación ha explicado que “es responsabilidad de las familias pedir que allí donde lleven a sus hijos haya medidas de seguridad extremas”. “Las exigencias que los padres nos piden dentro la escuela deben ejecutarlas ellos fuera”, ha señalado.

Seguridad en las aulas

Educación descarta realizar pruebas PCR a todo el cuerpo docente, iniciativa que sí se intentó llevar a cabo en otras comunidades autónomas como la de Madrid. En palabras de Bargalló, “las autoridades sanitarias nos dicen que no deben hacerse, ya que tampoco se han realizado a todos los sanitarios”.

Por lo que respecta a los termómetros, el conseller ha puntualizado que “los alumnos deben ir al colegio con la temperatura tomada”. De hecho, algunas escuelas solo disponen de un termómetro para todo su alumnado, una situación que Bargalló ha prometido que cambiará en las próximas semanas.